Tras nueve días ardiendo el Parque Nacional Macarao, un grupo de vecinos de la parroquia El Jarillo del Municipio Guaicaipuro, pidieron este lunes a la comunidad sumarse a las labores que buscan sofocar las llamas que ya han consumido más de 400 hectáreas en la zona del embalse de Agua Fría.
Douglas Núñez, residente de la zona, reconoció la labor de los efectivos del Cuerpo de Bomberos del estado Miranda, Protección Civil y voluntarios que desde el primer día intentan controlar el incendio forestal, “pero no es suficiente, tenemos que ayudarlos en esa labor antes de que ese pulmón de nuestro estado sea arrasado por completo”.
Asegura que ya muchos jarilleros han puesto a disposición de los funcionarios vehículos y tanques con agua para continuar con el combate. Agrega que pese a que la semana pasado el Gobierno Nacional anunció la activación de helicópteros, no ha sido suficiente.
Además del evidente daño provocado por las llamas a la vegetación, los residente dicen estar desesperados por la densa cortina de humo que cubre toda la población desde hace más de una semana, “hay zonas, próximas al embalse, donde es prácticamente imposible respirar, el humo no cesa y solo le rogamos a Dios que llueva”, agregó Magaly Bello.
El embalse suministra agua a más de 100.000 vecinos de Los Teques, El Jarillo y San Pedro de los Altos. Este parque, ubicado en la cuenca de los ríos Macarao, San Pedro y el Jarillo, tiene una extensión de 15.000 hectáreas y abarca parte del Distrito Capital y del estado Miranda.
