Cuando el venezolano José Ramón Olmedo decidió emigrar a Perú en 2018, el sueño de crear su propia academia de béisbol se difuminó. No solo por los retos que representa para un inmigrante comenzar de cero en otro país, sino porque ahí este deporte no es muy conocido.
Sin embargo, contra todo pronóstico, el sueño que tenía desde pequeño y que se le dificultó cumplir en Venezuela por la crisis económica, lo pudo materializar en Perú en el año 2020, cuando inauguró la academia Astros de San Juan de Lurigancho.
“Siempre quise tener una escuela de béisbol, no pensé que sería fuera de mi país, pero Dios trabaja de manera misteriosa”, dijo el venezolano en entrevista con la Voz de América.
En Perú, hogar de más de un millón de venezolanos, el béisbol ha comenzado a ganar popularidad gracias a esa diáspora, que ha impulsado la creación de academias como la de Olmedo, donde se forman niños y adolescentes no solo venezolanos, sino también peruanos.
“Ni en el sueño más loco pensé que sería en Perú”
Olmedo cuenta que cuando viajó a Venezuela en 2019 para buscar a su familia lo primero que empacó en la maleta su hijo, quien sigue los pasos de su padre, fueron los guantes, las pelotas y el bate.
“Al llegar a Perú chocamos con esa realidad de que no había béisbol. Sin embargo siempre nos íbamos a algún terreno para entrenar. Fue entonces cuando empezaron a llegar otros niños venezolanos y de a poco se fueron sumando más”, recuerda.
Estas prácticas improvisadas hicieron que resurgiera su sueño de crear su academia de béisbol. Luego de consultarlo con su familia, lo decidió.
“La siguiente semana empecé a repartir volantes en las estaciones del tren con mi chamo. Arrancamos oficialmente el 11 de noviembre de 2020 con la primera práctica. Desde entonces hasta la actualidad no ha dejado de ser un reto”, detalló.
La academia Astros de San Juan de Lurigancho, ubicada en Lima, tiene alrededor de 70 niños inscritos, entre venezolanos y peruanos, en cinco categorías. Además cuentan con dos sedes.
Desde su creación, el equipo ha participado en varios campeonatos organizados por otros venezolanos que también se han sumado a crear sus propias academias de béisbol. En 2022, el equipo de Olmedo quedó campeón en las cinco categorías de dos torneos diferentes.
Los logros que ha obtenido Olmedo con la academia y la formación de nuevos peloteros son sueños que jamás pensó que podría materializar lejos de su hogar.
“Ni en el sueño más loco pensé que sería en Perú. Tengo 16 años dando práctica de béisbol, cuando migré pensé que lo dejaría por un tiempo, pero Dios me sorprendió y me bendijo con esta escuela”, afirmó.
Con la mirada en Grandes Ligas
Con la academia de béisbol ya consolidada en Perú, José Ramón Olmedo trabaja para cumplir otra meta: que sus alumnos sean prospectos de Grandes Ligas. Hace más de un año creó una academia élite, parte de la academia principal, llamada la Academia Astros, que se encarga de desarrollar y explotar más a fondo las habilidades de los peloteros. Al menos ocho de sus alumnos van a viajar a Venezuela para tratar de obtener una firma con una organización de la Major League Baseball (MLB, por sus siglas en inglés).
El venezolano afirma que todo el trabajo que implica este reto no sería posible sin sus colaboradores Nicolás Herrera y Juan Urquía, quienes están en Perú a cargo de toda la logística. Sin ellos “nada de esto es posible”, aseguró Olmedo, quien ahora se encuentra en Venezuela para recibir y monitorear a los peloteros que viajarán desde Perú, mientras otros compañeros están encargados de la escuela de béisbol.
Olmedo asegura que lo que ha sucedido con la academia es una muestra de que no se debe renunciar a las metas aunque la situación en que se viva sea adversa.
Siente profundo amor por el béisbol. Dice que es “el deporte que amará toda su vida”, pero también siente un profundo agradecimiento por Perú, el país que le abrió las puertas y le ayudó a cumplir su más grande sueño.
Este venezolano y su equipo de colaboradores planean seguir trabajando para dar a conocer más este deporte buscando hacer llegar a Perú hasta las organizaciones de MLB. Su deseo es “que cada niño que se sume sea un hombre de bien para la sociedad”, agregó.
