La izquierda oficialista de Colombia perdió las elecciones locales de este domingo en las principales ciudades del país. Así se estima según el conteo oficial de la autoridad electoral.
Con un 55% de participación, las alcaldías de Bogotá, Medellín (noroeste), Cali (suroeste) y Barranquilla (norte) quedaron en manos de opositores o candidatos desligados del gobierno izquierdista de Gustavo Petro.
Carlos Fernando Galán (Nuevo Liberalismo) ganó la alcaldía de Bogotá con 49% de los votos sobre el independiente Juan Daniel Oviedo (20%) y se posesionará el 1 de enero.
El hijo del excandidato presidencial Luis Carlos Galán, asesinado por el narcotráfico en 1989, ganó en la ciudad de 8 millones de habitantes. Reemplazará a la centroizquierdista Claudia López (Partido Verde).
La alcaldía de Medellín fue para el derechista Federico Gutiérrez. La de Cali, para el empresario Alejandro Éder (centroderecha) y en Barranquilla la ganó el exalcalde Alejandro Char (centroderecha).
Desde que llegó Petro al poder en Colombia
En el poder desde agosto de 2022, Petro sufre revés electoral en unos comicios que son «una valoración de la gestión del presidente». Así lo explicó a la AFP Mauricio Velásquez, profesor de la Escuela de Gobierno de la Universidad de los Andes.
Con una desaprobación del 60% según la más reciente encuesta de Invamer, el primer mandatario de izquierda en la historia del país recibió un castigo en las urnas explicado por un «desgaste en términos de su imagen». Añadió el experto.
Los escándalos de corrupción que rodean a su familia, las dificultades para acordar la paz con los grupos armados y la creciente violencia le pasaron factura al gobierno, coinciden analistas.
La derrota de la izquierda oficialista en las principales ciudades de Colombia es un revés para el gobierno de Gustavo Petro. Este enfrenta una creciente desaprobación y desafíos en materia de paz, seguridad y corrupción.