En Reino Unido, la justicia declaró «ilegal» el polémico proyecto del gobierno conservador de Rishi Sunak que busca enviar a Ruanda a los solicitantes de asilo llegados irregularmente al país. El Tribunal de Apelación de Londres consideró este jueves que Ruanda no puede ser considerado «un país seguro». Sunak anunció que apelará ante el Tribunal Supremo.
Es un duro golpe para el gobierno británico. Los magistrados del Tribunal de Apelación declararon «ilegal» el proyecto del gobierno este jueves 29 de junio y rectificaron la tomada por la Alta Corte de Londres el pasado mes de diciembre.
La cuestión clave ante el tribunal era si Ruanda era capaz de ofrecer unos resultados fiables sobre las solicitudes de asilo y si existía el riesgo de que los solicitantes fueran expulsados por la fuerza a sus países de origen.
El tribunal ha dictaminado que, debido a las deficiencias del sistema de asilo de Ruanda, existía un riesgo real de que fueran devueltos a sus países de origen, donde son perseguidos y peligraría su integridad e incluso su vida.
Hay que tener en cuenta que muchos de estos solicitantes proceden de países en guerra o con regímenes no democráticos. De hecho, la apelación ha sido interpuesta por diez solicitantes de asilo de Siria, Irak, Irán, Vietnam, Sudán y Albania que llegaron al Reino Unido de forma irregular cruzando el Canal de la Mancha desde Francia en pequeñas embarcaciones. Presentaron el caso con la organización benéfica Asylum Aid.
Apelación ante el Tribunal Supremo
Es un duro golpe para el gobierno británico porque está intentando aprobar en el Parlamento una ley para enviar a todos los sin papeles a Ruanda y terceros países. También porque este es uno de sus principales puntos electorales.
«Pediremos permiso para recurrir esta decisión ante el Tribunal Supremo», afirmó el primer ministro conservador Rishi Sunak, expresando su «desacuerdo fundamental» con el fallo, en un comunicado difundido en Twitter.