El karateca iraní Mohamad Mehdi Karamí, condenado a muerte por su supuesta participación en las protestas en Irán, no tuvo acceso al letrado elegido, según denunció el abogado para casos políticos y de derechos humanos Mohamad Hosein Aghasi.
En un mensaje publicado en su cuenta de Twitter indicó que Karami solo ha tenido un abogado de oficio y pese a la conformidad del Tribunal Supremo, «el titular del tribunal se enfrentó a la ley y sostuvo que solo el abogado aprobado por el jefe del Poder Judicial tiene derecho a intervenir» en el caso.
Para este letrado el Tribunal Supremo iraní debería rechazar la sentencia de muerte de Karamí y aceptar la apelación.
El karateca, que anunció ayer el inicio de una huelga de hambre, fue condenado a muerte junto a otros cuatro acusados por supuestamente matar a principios del pasado mes de noviembre a un miembro de la milicia voluntaria basij llamado Ruholá Ajamian, en una de las concentraciones de protesta en un cementerio en la ciudad de Karaj.
La Justicia iraní informó ayer que ha aprobado la condena a muerte emitida en el tribunal inferior de dos de los acusados del citado caso pero puntualizó que ha aceptado la apelación de tres condenados.
Las protestas empezaron en Irán a mediados de septiembre, tras la muerte bajo custodia policial de Mahsa Amini, una joven de 22 años, por llevar mal colocado el velo islámico y al menos 2.000 personas han sido acusadas por la Justicia iraní de diversos delitos por su participación en las movilizaciones, de las que dos fueron ejecutadas en el mes de diciembre.
Las manifestaciones han sido duramente reprimidas, y según diferentes ONG, en los cerca de cuatro meses de protestas han muerto más de 450 personas.