Las flutuaciones en el mercado cambiario de la semana pasada han impactado en la operatividad de los comercios en Venezuela. De acuerdo con Tiziana Polesel, algunos proveedores no se están guiando por la tasa del Banco Central de Venezuela, obligando a los comerciantes a esperar por la reposición de inventario.
«Lo que está ocurriendo es que si el ese proveedor no acepta la tasa del BCV,el comerciante no puede hacer la operación», comentó.
La moneda extranjera ha experimentado un volátil aumento por la cantidad de dinero inorgánico suministrado por el Banco Central de Venezuela para financiar el pago del bono vacacional de los empleados públicos.
Aunque expertos económicos afirman que esta situación era previsible por la inviabilidad del financiamiento del Estado al mercado de divisas, el pasado viernes, el ente emisor inyectó más de 100 millones de dólares al mercado que se suman a los 98 millones del jueves para contener el alza de la divisa.
En lo que va de 2022, el BCV ha vendido a la banca casi 3.000 millones de dólares para intentar frenar la devaluación del bolívar.