La Misión Internacional Independiente de determinación de los hechos de la ONU sobre Venezuela confirmó este miércoles 16 de septiembre en su primer informe que funcionarios de la Fuerza de Acciones Especiales (FAES) simulan enfrentamientos para encubrir asesinatos.
“Funcionarios de la PNB/FAES dijeron a la Misión que era una práctica común encubrir los asesinatos plantando armas para simular enfrentamientos, un proceso al que los funcionarios de la PNB/FAES se refieren como sembrar semillas”, indicó el documento.
El informe señala que, tras entrevistar a una fuente con conocimiento sobre los procedimientos internos del organismo de seguridad del Estado, se confirmó que los superiores pueden dar a los oficiales “luz verde” para matar.
“Un video de entrenamiento de la FAES, autentificado por la Misión, muestra a los funcionarios siendo animados a matar criminales sin compasión“, agregó dice el estudio.
La FAES y el Cuerpo de Investigaciones Penales y Criminalísticas fueron responsables de 59% de todas las muertes perpetradas por las fuerzas de seguridad en el período analizado por la Misión. Fueron también los autores de la mayoría de las ejecuciones extrajudiciales documentadas en el informe.
Asesinatos impunes
Venezuela tiene una de las tasas más altas de América Latina de asesinatos cometidos por agentes del Estado.
La Misión investigó 16 casos de operaciones policiales, militares o conjuntas que dieron lugar a 53 ejecuciones extrajudiciales. También examinó 2.552 incidentes adicionales en los que se produjeron 5.094 muertes por las fuerzas de seguridad.
Los representantes de la ONU investigaron 140 operaciones que realizaron las Operaciones de Liberación del Pueblo entre 2015 y 2017 donde murieron 413 personas, en ocasiones con disparos a quemarropa.
“Los altos funcionarios del gobierno elogiaron repetidamente las operaciones, mismas en las que solían participar cientos de oficiales armados que asaltaban algunas zonas, a veces utilizando vehículos blindados y helicópteros“, añadió el documento.
La Misión determinó que la mayoría de las muertes ilegales cometidas por las fuerzas de seguridad no han dado lugar a enjuiciamientos y en ningún momento se ha llevado ante la justicia a los funcionarios con responsabilidad de mando.
Marta Valiñas, presidenta de la Misión, afirmó que los oficiales de alto rango tenían el mando y control sobre las acciones que desencadenaron estas ejecuciones, pero no hicieron nada para prevenir o reprimir las violaciones.
“Los asesinatos parecen formar parte de una política de eliminación de miembros no deseados de la sociedad bajo la cobertura de la lucha contra el crimen,” dijo Valiñas.
“La FAES deben ser desmanteladas y los responsables de todas las fuerzas de seguridad así como sus cadenas de mando deben rendir cuentas”, destacó el documento.
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