Al menos dos guardaespaldas acompañan a Elon Musk por la sede de Twitter y lo siguen incluso al baño, según contó un ingeniero de la empresa a la BBC.
El ingeniero, que habló bajo condición de anonimato para proteger su empleo, dijo que los guardaespaldas eran “voluminosos” y “altos” y como si fueran de una “película de Hollywood”.
No es un dato llamativo en el contexto de quién es Musk: es común que figuras de alta exposición mediática vayan acompañados de guardaespaldas, o que las empresas gasten grandes sumas de dinero en proporcionarles detalles de seguridad. Mark Zuckerberg, de hecho, gasta una millonaria suma para garantizar su seguridad.
El ingeniero dijo que pensaba que el uso de guardaespaldas por parte de Musk dentro de la sede de Twitter en San Francisco, sugería una falta de confianza en los empleados de la compañía, según el informe de la BBC publicado el domingo.
Twitter no respondió de inmediato a la petición de comentarios de diversos medios estadounidenses que intentaron conseguir una declaración sobre el tema.
El padre de Musk, Errol, dijo en enero que temía por la seguridad de su hijo a pesar de que estaba protegido por “100 guardias de seguridad”. Musk había mejorado el sistema de seguridad de Errol para su casa de Sudáfrica con guardias armados las 24 horas, cámaras y vallas eléctricas, dijo Errol.
Poco después de adquirir Twitter en octubre, Musk despidió a miles de empleados de la empresa como parte de una amplia campaña de reducción de costos.
El diario The New York Times aseguró la pasada semana que la última ronda de despidos, de hace 9 días, supuso la partida del 10 % de las 2.000 personas que conformaban la plantilla después de varias tandas de recortes que han dejado la empresa con prácticamente la cuarta parte de su personal, pues eran 7.500 en el momento en que Elon Musk compró la compañía.
Twitter: segunda caída en una semana
La red social funciona de manera inestable. Foto Reuters
Mientras tanto, la red social sigue inestable. Durante la mañana de este lunes experimentó problemas en todo el mundo a la hora de cargar fotografías o ver correctamente la versión de escritorio.
La compañía, que sufrió de este modo su segunda caída a nivel global en menos de una semana, no dio muchas precisiones sobre las razones, salvo que habían emprendido «algunos cambios a nivel interno con consecuencias imprevistas».
Según la web DownDetector, que monitorea en tiempo real las incidencias que se registran en las principales tecnológicas, los primeros problemas han comenzado a registrarse sobre las 16.53 horas GMT y han afectado a los usuarios en todo el mundo.
Los usuarios de la plataforma han informado de fallos a la hora de acceder a la versión de escritorio a través del ordenador, pinchar enlaces publicados en la red o tuitear imágenes.
En algunos casos, han saltado al «feed» de algunas cuentas mensajes posteados por otros usuarios años atrás como si fueran nuevos.
Esta es la segunda caída que Twitter sufre en menos de una semana, después de que el miércoles pasado la red social, propiedad de Elon Musk, sufriera fallos que impedían a algunos perfiles ver los mensajes nuevos que enviaban sus seguidores o actualizar la página de inicio.
«Las cosas deben estar funcionando con normalidad. ¡Gracias por quedarte con nosotros!», escribió la red social 50 minutos después de que admitiera en otro tuit que «algunas partes de Twitter no están funcionado como se espera en estos momentos».