Este día dio inicio a la cuenta regresiva para decirles adiós de la agenda real a los Duques de Sussex, para hacer efectiva la renuncia a sus títulos mayores y compromisos reales, que presentaron en el pasado mes de enero. Meghan Markle reaparece con vestido azul celeste y un mensaje de rebeldía para la realeza.
De la mano de su esposo, Meghan Markle arribó con una sonrisa de oreja a oreja, luciendo radiante un vestido azul celeste, para cumplir uno de sus últimos eventos como miembro activo de la realeza, antes de regresar a su nueva vida a Canadá.
Ella vistió un hermoso vestido color azul bebé de corte lápiz de la firma Victoria Beckham, que resaltaba en la noche, unas zapatillas de gamuza negra de Manolo Blahnik BB, y un bolso de Stella McCartney.
En una manifestación rebelde hacia la realeza, Meghan Markle, a diferencia de otros momentos y otras royals, acudió bastante maquillada, como toda una celebridad.
La cita fue en Mansion House en Londres, celebrando los Edeavour Fun Awards, donde se honran a militares enfermos y heridos que han participado en desafíos deportivos y de aventuras en el último año.