A mediados de mayo de 2020 Ruben y Ángel se reunieron para poner punto final a la empresa que habían creado. La pandemia llegaba para estancar el crecimiento que venía experimentando su marca de cerveza artesanal.
«Nos reunimos para ver cómo repartiamos la inversión», recuerda uno de los accionistas de LAM (Los Altos de la Montaña), mientras muestra orgulloso -14 meses después- la que se ha convertido en la cerveza artesanal emblema de los Altos Mirandinos.
La pandemia, generada por el Covid-19, se convirtió para este par de tequeños en una nueva oportunidad que, sin duda, supieron aprovechar.
«Familiares, amigos y conocidos, que estaban aburridos en su casa por el confinamiento, comenzaron a llamarnos y pedirnos cerveza delivery», recuerda.
Así el proyecto, que nació en la ciudad de Los Teques, retomó vuelo. «De pronto la cuarentena fue como una luz al final del túnel, ante la gran cantidad de pedidos comenzamos a embotellar de forma artesanal».
El inicio
LAM nació un fin de semana cualquiera en casa de Ruben y su socio. «Nos reuníamos para hacer cerveza y beberla, así salió la idea de comercializar debido a que nuestras amistades decían que el producto era agradable», recuerda.
La cocina de Ángel se convirtió en la fábrica. En un pequeño espacio, comenzó a almacenar botellones de 20 litros que usaban como fermentadores. «De pronto estallaban en la madrugada», rememora entre risas.
Poco a poco, a pesar de la situación país, comenzaron a adquirir los implementos adecuados.
«Fue como una bola de nieve, fue creciendo y creciendo y llegamos a este producto, todo esto antes de la pandemia», indica Ruben.
Sabor y pasión
El emprendimiento comenzó a ser conocido gracias al boca a boca y a las redes sociales. «La gente comenzó a hablar de una cerveza que vendían por WhatsApp y llevaban hasta la casa, es así como cada día aumentaban nuestros clientes».
En la actualidad, el demandado producto se puede consumir en Cafe Race, un conocido restaurante temático ubicado en San Antonio de los Altos.
«Los amantes de la cerveza artesanal pueden consumir aquí LAM servida en sifón», agrega Ruben mientras muestra la barra.
Ofrecen «la morena», bautizada así por su color, se trata de su producto bandera con aromas frutales.
También tienen «la rubia», más intensa en sabor, dirigida a ese público que poco conoce del mundo de la cerveza artesanal y que lo seduce la idea de probar.
Ruben Dario Ribas Terán es contador público y matemático, mientras que su socio Ángel Pignataro, es graduado en idiomas modernos, este último fue quien conoció sobre este mundo al vivir en Alemania.
Taproom a la vista
Proyectan para los próximos meses poder ofrecer 10 sabores de LAM en un #taproom que habilitará el famoso restaurante Café Race en su amplio estacionamiento.
¿Qué es un taproom?. Pues bien, en resumidas cuentas se podría decir que un taproom es básicamente un bar donde las cerveceras sirven sus propias cervezas.
La gente de LAM esperan con este novedoso espacio contar con el apoyo de una comunidad cervecera que se siente profundamente comprometida con estos artesanos de la cerveza.
Será sin duda un espacio donde los altomirandinos podrán brindar con el orgullo de estar consumiendo un producto elaborado en lo más alto de nuestras montañas.
Daniel Murolo
Fotos: Luis Sajaro