La excongresista Aida Merlano llegó este viernes a la cárcel El Buen Pastor, en Bogotá, donde cumplirá las dos condenas que tiene pendientes por delitos electorales, así lo reseñó la REVISTA SEMANA.
Este mismo centro carcelario donde la dirigente política conservadora estará recluida, fue el mismo lugar en el que planeó su cinematográfico escape en octubre de 2019 después de asistir a una cita de diseño de sonrisa.
Merlano, quien fue deportada este viernes tras estar tres años en Venezuela, había pedido por medio de su defensa un lugar de reclusión que le brinde todas las medidas de protección y seguridad, esto al advertir que teme por su vida por las denuncias que ha hecho en contra de clanes políticos de la costa, entre ellos las familias Char, Name y Gerlein.
Luego de su deportación, y en una rueda de prensa que se celebró en la sede de la Dijín de la Policía, la exrepresentante a la Cámara manifestó que quiso regresar al país a “hacerles frente a todos los procesos que cursan en mi contra, a dar la cara a la justicia para responder por los delitos que cometí, y para defenderme de los delitos que me imputaron injustamente y de los que yo me declaro inocente”.
“Voy a seguir dando la batalla hasta demostrar la inocencia en los montajes de los que fui víctima de un clan político mafioso de la costa Caribe”, enfatizó.
Merlano también aprovechó para pedirle al presidente Gustavo Petro que garantice su seguridad y la de su familia, ya que, sostiene Merlano, “han sido víctimas de amenazas, atentados e intentos de secuestro denunciados desde hace muchos años sin eco en la Fiscalía General de la Nación”.
“También, pedirle por mi integridad porque temo por mi vida, temo ser víctima de un atentado y que esta vez lo logren. El día que intentaron asesinarme en una finca, luego de ser violada, logré salir sana y salva y me resguardé en el gobierno del presidente Nicolás Maduro”, afirmó.