Aprovechando la moda de multigéneros, definimos a los “Transvotantes” como aquellos individuos que se auto perciben como votantes, a pesar de que su voto en la realidad no vale para nada.
Así pues, dedicamos estas líneas para aquellos que tras 23 años y casi 30 elecciones con instituciones 100% psuvizadas, todavía creen que el sufragio algo cambiará.
Tras conocerse la nueva designación del máximo órgano electoral, queda demostrado la estrategia del régimen fue evitar prestar “apoyo técnico” del CNE a las primarias, cuando aún no sabe qué hacer con “ciertos inhabilitados”… si los excluían mataba las presidenciales antes de tiempo, si los permitía ¿Cómo excluirlos en las elecciones? O más aún, ganar tiempo para saber si permiten o no las primarias.
Otra realidad demostrada es que, una vez más, UNT, partido cuyo líder fue indultado para que participase en todas las simulaciones electoreras y AD, organización que nunca ha sido oposición, sino que históricamente se alía con los gobiernos de turno, forman parte, nos atrevemos a decir, decorativa de este nuevo CNE, por lo que, ante la inminente prohibición a María Corina Machado de participar en las primarias, ya veremos a Prosperi como el candidato “más fuerte” entre otros enanos en intención de voto. Los ungidos para participar lo harán bajo acuerdo de no protestar procedimientos ni resultados, porque ya habrán cobrado… así lo hicieron los de 2018.
¡Increíble! María Corina Machado, vetada en los medios, víctima de una feroz guerra mediática, atacada por el régimen y la falsa oposición, inhabilitada inconstitucionalmente, con prohibición de registrar a su organización Vente, perseguida, saboteada, acosada, etc. día a día aumenta su apoyo popular ¡El mensaje es obvio!
¿Cuál es el mensaje? Los venezolanos se cansaron de mismos discursos, sobre todo, mismas acciones con mismos resultados.
Aunque régimen y cómplices insisten en arrastrar al país a otro matadero electorero, cediendo a la agenda del castrismo venezolano, ella ha sido radicalmente opuesta y reta al régimen en lo que es, a todas luces, una inhabilitación espuria, inconstitucional.
Es decir, la nación anhela una oposición extrema, real, radical.
Al respecto, es perentorio destacar. La presión política internacional e interna (la social), derivada de María Corina Machado, es lo que perturba al régimen.
Sin embargo, la conducta amaestrada de quienes siguen su agenda como elecciones 100% psuvizadas es lo que lo estabiliza.
Los transvotantes votan con registros Saime corrupto, no olvidemos que fue su propio director nacional quien hace meses ratificó esa información, lo que es igual a decir, que el registro electoral también está corrupto, pues el primero alimenta al segundo, así solo ocurrirá lo que predetermine el chavismo.
Todas las instituciones públicas están psuvizadas, solo existen candidatos ungidos por los rojos, por los partidos que permite el castrismo venezolano, con resultados que imponen los rojos rojitos tal como lo demostró Smartmatic en 2017 y un sinfín de absurdísimos más ¿Y los que nos oponemos a votar en estas condiciones inadmisibles somos los que favorecemos al régimen? ¿En serio?
Sería una tragedia histórica arrastrar independientes, bases de partidos, chavistas que se han sumado al clamor de cambio radical, a otra elección confeccionada milimétricamente a la medida del régimen y sus cómplices donde nada pasa, se vote mucho, muchísimo, poco, se gane, pierda o nos abstengamos.
Lo electoral es lo último, lo primero es crear condiciones, rescatar la libertad y para que ello ocurra hay que salir de la zona de confort de los destructores del país, elecciones 100% arregladas.
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