En un emocionante partido, los Boston Celtics se alzaron con su 18º título de la NBA al derrotar a los Dallas Mavericks con un marcador de 106-88 en el quinto y definitivo partido de las finales.
Este triunfo los posiciona por delante de los Lakers, quienes tienen 17 trofeos. El equipo de Jayson Tatum y Jaylen Brown demostró su superioridad durante todo el encuentro, especialmente en la defensa, manteniendo a los Mavericks por debajo de los 100 puntos, una marca clave para la victoria.
Brown fue elegido MVP de las finales, reconociendo su contribución tanto en ataque como en defensa. Los Celtics, liderados por el entrenador Joe Mazzulla, han demostrado ser un equipo sólido y balanceado. Su defensa también ha sido excepcional que ha sido fundamental para su éxito.
Esta victoria es especialmente significativa para Boston, que celebra su primer título desde 2008. Además afianza su rivalidad con los Lakers en la carrera por el récord de campeonatos de la NBA. Con este triunfo, los Celtics demuestran que están listos para una era de dominio en la NBA.