La ciudad de Los Teques celebra hoy sus 244 años sumida en una crisis de servicios públicos sin precedentes en su historia.
Sin agua, constantes apagones, fallas en la recolección de basura, distribución de gas y vías minadas de huecos y fallas de bordes los tequeños aseguran que no hay motivos para celebrar.
«Lo que nos queda es la esperanza de un próximo cambio. Mi hermosa ciudad luce abandonada como nunca antes», asegura Erika Briceño, comerciante tequeña.
Similar es la opinión de Oscar Salcedo, conductor de transporte público, quien desea para su terruño autoridades que realmente le duela Los Teques.
«Hemos tenido muy mala suerte con los alcaldes, ninguno ha hecho nada realmente importante por la ciudad», indicó Enrique Franco, estudiante universitario.
Sin embargo, todos los consultados por #ElTequeño rescatan el buen clima, las verdes montañas y la amabilidad de sus habitantes, lo que la hace – a su criterio – una urbe única e inigualable.