Nicolás Maduro invitó este martes al Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, a volver a abrir su oficina en Venezuela, dos meses después de haber expulsado a su personal del país.
«He recibido la propuesta de invitar nuevamente a la apertura de la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU, Volker Türk, a estar en nuestro país, en Venezuela. Estoy de acuerdo que superemos las diferencias, el conflicto que tuvimos y estoy preparado para recibir al enviado de Volker Türk pronto«, dijo Maduro en una alocución conjunta con el fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, quien le hizo la propuesta para el retorno del personal de la ONU a Caracas.
Maduro dijo que «como siempre, las puertas del palacio de Miraflores están abiertas para que venga Volker Türk, para que mande a José María Aranaz cuando quiera, donde quiera y hablemos las diferencias que tenemos, el conflicto que surgió y lo superemos. Cuando quiera, donde quiera y como quiera».
«Reconstruyamos los puentes de comunicación sobre la base del respeto, del diálogo y la comunicación y avancemos. Estoy de acuerdo. He acogido con beneplácito la propuesta», reiteró.
El pasado 15 de febrero el régimen de Nicolás Maduro anunció la expulsión del personal de Derechos Humanos de la ONU, luego de que la oficina del alto comisionado Volker Türk expresara su preocupación por la desaparición forzada de la presidenta de la ONG Control Ciudadano, Rocío San Miguel.
En esa oportunidad, Maduro acusó a la Oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas en Caracas de realizar actividades de «espionaje y conspiración».
«Esa oficina se desvió (…) se transformó en una oficina de espionaje interno, de conspiración interna (…) en el bufete de abogados de terroristas, conspiradores, golpistas y magnicidas de Venezuela», dijo el mandatario durante su programa semanal de televisión.
