En San Fernando, capital del estado Apure, el magisterio entregó un documento en la Inspectoría del Trabajo para denunciar las violaciones laborales de la gobernación en contra del gremio, tras la migración de los docentes regionales a la nómina del Ministerio de Educación.
En la protesta, los trabajadores también efectuaron un rayado de carros en el centro de la ciudad para mostrar su descontento con las políticas gubernamentales en materia salarial.
Deysi Solórzano, presidenta de la Federación Venezolana de Maestros en Apure, informó que los sindicalistas fueron recibidos por el inspector del Trabajo, y le entregaron un documento en el cual detallan los beneficios que han dejado de percibir los docentes ante la migración de la nómina: prima de ruralidad, años de servicio y jerarquías.
Por su parte, maestros de El Nula, parroquia San Camilo, en el municipio fronterizo José Antonio Páez, sostuvieron una asamblea este lunes 27 de febrero para llegar a acuerdos, evaluar los avances en la lucha sindical y recibir denuncias de los docentes, víctimas de atropellos por parte del régimen de Nicolás Maduro, por apoyar el paro de educadores.
Leyda Valencia, sindicalista de SUMA en El Nula, dijo a lapatilla.com, que los profesores de esta zona fronteriza no solo están comprometidos con esta causa, porque todo el gremio debe recibir mejoras salariales, sino también rechazan que los padres deban financiar las escuelas ante ineficiencia gubernamental.
“La clase obrera y trabajadora no está dispuesta a callar las faltas del Estado, el olvido y el abandono que en que tienen al sector de la educación. Por eso permaneceremos en pie de lucha hasta agotar todas las instancias posibles para garantizar una educación de calidad”, apuntó.
Para Valencia, los educadores son obligados a trabajar en condiciones esclavizantes y miserables, porque no cuentan con ningún beneficio.
“Somos seres humanos, no somos inmortales, también tenemos familias que alimentar, y por eso permaneceremos inquebrantables”, declaró.