Lo que parecía un plácido viaje de Navegantes del Magallanes hacia el triunfo, encontró una amenazante marea en la novena entrada del domingo, contra Cardenales de Lara.
El mánager Eduardo Pérez le dio la bola a Wilking Rodríguez para cerrar el careo con una ventaja de cuatro carreras. Sin embargo, el derecho admitió tres sencillos, incurrió en dos wild pitch y otorgó una base por bolas, para ver disminuida la diferencia a sólo un par de rayas, con la de ser dejado en el terreno en el cajón de bateo.
Ante ese escenario, el piloto optó por traer a Luis Martínez, quien con sólo un envío dominó a Juniel Querecuto con un elevado hacia el jardín izquierdo que tomó Alberth Martínez, el otro colombroño protagonista de la noche, para bajar el telón con pizarra final de 5-3 en el Estadio Antonio Herrera Gutiérrez de Barquisimeto.
Los Martínez se unieron a través de una cuerda sujetada en extremos completamente opuestos. Luis se apuntó su primer juego salvado luego de 94 apariciones en la LVBP. Pero Alberth, sacudió su jonrón 53 de por vida, todos con el Buque, para igualar en el segundo lugar del departamento de todos los tiempos en la franquicia a Mario Lissón, de acuerdo con los registros oficiales del club.
“Estoy muy contento y orgulloso de ya estar en el segundo puesto con más jonrones en el equipo, pero esto apenas comienza”, dijo Alberth a la transmisión de ByM Sport tras el dramático último out. “En este momento, me enfoco en aprovechar cada oportunidad en que me ponen a jugar, dando el 100 %”.
El guayanés despachó su vuelacerca en la cuarta entrada, ante los envíos del derecho Max Castillo, por el bosque izquierdo. Encontró, en ese momento, un corredor en circulación para poner el marcador 4-0.
WEST DOMINANTE
Por Magallanes, Derek West (1-1) tuvo su segunda apertura de la campaña y, nuevamente, demostró que puede afianzarse como uno de los abridores habituales de la divisa.
El derecho se apuntó la victoria tras laborar 5.0 episodios en blanco, con cuatro hits admitidos, pero todos sencillos, y dos boletos regalados que no llegaron a hacer daño, en buena medida, por los seis roletazos que indujo.
West enfrentó a 21 rivales, efectuó 88 envíos -25 más que en su primera salida- y 53 de ellos fueron strikes. Además, ponchó a un rival, para completar su línea.
“La clave fue mantener a los bateadores fuera de base tanto como pudiera y dejar que la ofensiva se encargara de llevar el juego”, describió el estadounidense al departamento de prensa nauta. “Además, conté con una gran defensa de mis compañeros que me permitieron mantenerme en el juego. Tuve un par de innings complicados con corredores en las almohadillas y ellos hicieron el trabajo cuando lo necesité”.
Tras el importado, Alfred Gutiérrez, Deolis Guerra y Ángel Acevedo lanzaron un capítulo en blanco cada uno. Antes de que Wilking Rodríguez se metiera en problemas, y cediera el testigo a Luis Martínez, con su rescate.
Max Castillo (3-2), a su vez, cargó con la derrota tras tolerar ocho incogibles y cuatro carreras -todas limpias- en 5.0 tramos, con tres recetados a su cuenta.