El mundo del fútbol ha perdido a su rey. Edson Arantes do Nascimento, Pelé, falleció en la tarde del pasado jueves 29 de noviembre, a los 82 años. Y a su madre, Celeste Arantes do Nascimento, quien el pasado 20 de noviembre cumplió 100 años, le dijeron hasta este lunes, según revela la prensa brasileña en las últimas horas.
Así le dieron la dura noticia
“Mi mamá no sabe que él murió. Nosotros conversamos, pero ella no sabe. Ella está bien, pero está en su mundo… ella no sabe, aunque a veces pareciera que sí. Yo le digo: ‘Celestica, Dico está así’. Ella abre los ojos y yo le digo: ‘Vamos a rezar por él’, pero ella no está consciente”, le había dicho María Lucía, hermana menor de Pelé, a ‘ESPN Brasil’, el pasado viernes, en Sao Paulo.
Ahora, según publica el grupo de medios brasileño ‘Récord’, dueño de ‘Record Tv’ y ‘R7’, Doña Celeste ya fue informada de que falleció Pelé.
“Postrada en cama, la madre de Pelé es informada sobre la muerte de su hijo”, es el titular de la noticia relacionada en la versión digital ‘R7’.
Según cita el medio en cuestión, la presentadora Ana Paula Neves, del programa matinal ‘Hoje em dia’, habló con María Lucía, la hermana de Pelé, quien le habría confirmado que le dieron la dura noticia a Doña Celeste.
«La revelación solo fue hecha en la noche del lunes, por la hermana de Pelé, María Lucía», reseña ‘R7’, sin dar mayores detalles.
«La familia tenía dudas sobre la información de la muerte para Doña Celeste», se lee líneas abajo.
El lunes, precisamente, muchos se sorprendieron al saber que su madre estaba con vida y que el cortejo que recorrería Santos, hogar del club donde el exdelantero construyó buena parte de su leyenda, tenía previsto visitar su casa antes de dirigirse al cementerio donde será enterrado. Y así fue: el féretro negro donde reposa su hijo pasó al frente de su residencia, aunque ella no apareció.
Pelé perdió a su padre, conocido como ‘Dondinho’, en noviembre de 1996. El exastro solía contar que prometió a su padre que ganaría una Copa del Mundo luego de verlo llorar por el ‘Maracanazo’, como se conoce la victoria de Uruguay por 2-1 contra Brasil en la final del Mundial de 1950, disputada en el legendario estadio de Rio de Janeiro.
Aparte de conquistar la primera estrella para la ‘Seleçao’ en Suecia-1958,
Pelé le regaló a ‘Dondinho’, también exfutbolista en clubes como el Atlético Mineiro, y a los brasileños otros dos trofeos mundialistas: Chile-1962 y México-1970.
Pese a su palmarés sin parangón, el ídolo aprendió de sus padres la virtud de la modestia. «Nunca pensé que era mejor o más que nadie. Es la educación que tuve», explicó en el documental ‘Pelé’, de Netflix.