Más de mil 500 familias de la urbanización Colinas de Carrizal, ubicadas en el Municipio Carrizal del estado Miranda, volvieron a las calles para exigir a la empresa Estatal CANTV la reparación del servicio de telefonía fija e internet.
Jaime Largo, presidente de Asolago, destacó que es inaudito que miles de personas estén desconectadas en medio de una pandemia cuando para estudiar o trabajar es indispensable el Internet.
«Es una necesidad imperiosa que las autoridades, la empresa, en este caso CANTV tome acciones que sean contundentes y efectivas para los afectados», indicó Largo, quien participó en la protesta realizada en la plaza de Montañalta.
Recordó que el año pasado, gracias aúna marcha que realizaron hasta la sede de la empresa, la alcaldía los contactó y se crearon mesas de trabajo, «después de esa mesa tanto la empresa como la alcaldía nos han ignorado, al menos en el grupo que se creó para estar al tanto del cronograma de reparaciones que iban a hacer».
Largo aseguró que ni el ayuntamiento local ni la empresa Estatal les da respuesta, «nosotros preguntamos cuáles son los sectores que se van a trabajar y sencillamente nos ignoran».
Dijo que levantaron una detallada base de datos con todas las fallas que hay sector por sector, «creamos responsable por cada comunidad a través de la asociación de vecinos o como comunidades organizadas que somos» .
«En este momento nosotros no sentimos burlados, porque hemos prestado nuestro servicio, nuestro tiempo para sentarnos con ellos, porque este no es un problema de política, es un problema de necesidad que tenemos de estar comunicados e informados», dijo.
Agregó que muchos niños y jóvenes están perdiendo este año escolar porque no pueden acceder al internet para recibir sus clases, «hacemos un llamado exclusivo a la empresa CANTV y al alcalde para que se respeten las mesas de trabajo y tomen la opinión y colaboración de los vecinos para poder resolver el problema».
Por su parte Irma Gómez Parraga, vecina del sector, aseguró que los residentes de la zona están «hartos» de la situación que nadie resuelve.
Detalló que si los vecinos dejan de pagar el servicio se lo cortan y no lo vuelven a instalar «por lo que se ven obligado a cancelarlo sin la contraprestación de lo que se está pagando».
«Es una situación delicada donde se viola lo que establece la Constitución que es el derecho al trabajo, a estar comunidado, informados y a que los muchachos tengo educación», puntualizó.
Daniel Murolo – PDC
