El presidente argentino, Javier Milei, en Israel realizó una emotiva visita al Muro de los Lamentos en Jerusalén, uno de los sitios más sagrados del judaísmo. Este acto simbólico marca un momento significativo en su viaje personal hacia el judaísmo y su compromiso con la comunidad judía.
Milei, acompañado por el rabino Shmuel Rabinowitz, depositó un papel con sus oraciones entre las piedras del muro. Esta es una tradición milenaria que representa la conexión con Dios y la esperanza de un futuro mejor.
Este gesto de fe y respeto por la tradición judía resuena con la historia personal de Milei, quien ha expresado públicamente su interés en profundizar su conocimiento del judaísmo y fortalecer su vínculo con la comunidad.
La visita al Muro de los Lamentos también tiene un significado político, ya que Milei ha sido un firme defensor de Israel y su derecho a existir como Estado judío. Su presencia en este lugar sagrado envía un mensaje de apoyo y solidaridad a la nación israelí.
En un contexto de creciente antisemitismo en todo el mundo, la visita de Milei al Muro de los Lamentos es un poderoso símbolo de tolerancia y respeto por la diversidad religiosa. Su compromiso con la fe y la comunidad judía es un ejemplo inspirador para las nuevas generaciones.