El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, aseguró este jueves que el líder supremo iraní Alí Jameneí, a quien se refirió como «el Hitler moderno», «no debería seguir existiendo», en declaraciones a la prensa desde el hospital donde esta mañana hizo impacto un misil de Irán.
«Las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel) han recibido instrucciones y saben que, para lograr todos los objetivos, este hombre, sin lugar a dudas, no debería seguir existiendo», dijo Katz, en declaraciones recogidas por medios como The Times of Israel o Ynet.
En los últimos días, tanto Katz como el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, han endurecido su retórica contra las autoridades iraníes, al tiempo que el Ejército ha intensificado sus bombardeos contra el país persa, donde cientos de personas han muerto, incluidos altos cargos militares y científicos nucleares.
El propio Netanyahu dijo este lunes en una entrevista con la cadena estadounidense ABC que la muerte de Jameneí pondría fin al conflicto, en lugar de escalarlo.
Katz, en su mensaje a la prensa, dijo que el ayatolá iraní es «el Hitler moderno», y que si Israel hubiera existido durante la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto, su Ejército hubiera «capturado» al dictador alemán y lo hubiera «eliminado».
Poco antes, Katz, en respuesta al misil iraní que esta mañana impactó contra el centro médico Soroka, en la localidad de Beerseva (sur de Israel), aseguró haber ordenado a las fuerzas israelíes intensificar sus ataques contra Teherán.
«Estos son crímenes de guerra de la mayor gravedad, y Jameneí responderá por sus crímenes», dijo el ministro en un comunicado.
El ataque contra el Soroka provocó daños contra un edificio pero solo dejó heridos leves, ya que los pacientes y el personal sanitario se encontraban en lugares protegidos y la planta afectada había sido evacuada en los últimos días, según dijo a la prensa el director del hospital.
EFE