Un guardia de seguridad de un almacén de alimentación alcanzado por uno de los misiles Kh-22 disparados anoche por Rusia contra la región de Odesa murió esta madrugada como consecuencia del ataque en esta provincia ucraniana situada a orillas del Mar Negro, informó hoy una portavoz del ejército ucraniano.
«Información oficial: tres trabajadores heridos sufrieron heridas leves, mientras que el cadáver de un empleado fue encontrado entre los escombros», afirmó la portavoz del comando sur del ejército ucraniano, Nataliya Gumeniuk, en el servicio nacional televisivo de noticias.
El almacén de alimentación se incendió como resultado del impacto. Más de 90 bomberos han sido movilizados para apagar el fuego, que pudo extinguirse durante la madrugada, explicó la portavoz militar ucraniana.
Además del almacén, el ataque con misiles ruso contra la región de Odesa también alcanzó un área recreativa de la costa del Mar Negro. Según el comando sur del ejército ucraniano, los misiles fueron lanzados desde aviones.
EFE