De los 23 muertos confirmados hasta el momento tras el impacto de un misil ruso en un bloque de apartamentos en Umán (centro de Ucrania), cinco son niños, informó este sábado el Ministerio del Interior.
“En el proceso de identificación se ha constatado que han muerto cinco menores: dos niños (de un año y medio y de 16 años) y tres niñas (ocho, 11 y 14 años)”, escribió el servicio de prensa del Ministerio en su cuenta de Facebook.
“Una mujer sigue desaparecida. La búsqueda continúa”, añadió el mensaje, atribuido al ministro del Interior, Ihor Klymenko.
Como resultado del ataque, que se produjo en la madrugada del viernes y que causó daños en una decena de bloques de apartamentos, fueron heridas además 18 personas.
Los bombardeos masivos nocturnos de las tropas de Putin volvieron a causar estragos en edificios residenciales de varias ciudades. Moscú dijo que atacó sólo «objetivos militares» y que la operación «fue un éxito»
Por otro lado, una mujer y su hijo de corta edad murieron ayer en Dnipro (este) a consecuencia del impacto de otro misil ruso.
De acuerdo con el Ministerio de Defensa ruso, los ataques se dirigían contra objetivos militares ucranianos y todos ellos fueron “alcanzados”.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, condenó el viernes los ataques rusos que alcanzaron zonas civiles.
“La pasada noche el enemigo atacó otra vez Ucrania con misiles y drones. Los terroristas alcanzaron infraestructura y civiles”, dijo Zelensky en su cuenta de Telegram, que explicó que diez edificios de viviendas fueron alcanzados por el bombardeo en la ciudad de Umán y también ofreció su pésame a las víctimas de Dnipró.
Zelensky pidió a la comunidad internacional “una respuesta justa” a este bombardeo ruso. “Cada ataque como este, cada acto de maldad contra nuestro país y nuestra gente, lleva al Estado terrorista más cerca del fracaso y de ser castigado y no al revés como ellos piensan”, declaró Zelensky.
“No olvidaremos ningún crimen, no dejaremos que ningún invasor esquive su responsabilidad”, añadió el jefe del Estado ucraniano, cuyo mensaje iba acompañado de fotografías de varios edificios incendiados y parcialmente destruidos por el ataque ruso de esta madrugada.
Zelensky dio las gracias a los militares ucranianos que operan las defensas antiaéreas que protegen las ciudades ucranianas de los ataques rusos con misiles y drones y también tuvo palabras de agradecimiento para los equipos de rescate.
El presidente explicó también que los servicios de emergencias siguen trabajando para rescatar a personas de debajo de los escombros en Umán. “Aún hay gente atrapada”, escribió Zelensky.
Rusia disparó más de 20 misiles de crucero y dos drones contra Kiev y otras partes de Ucrania durante la madrugada de este viernes en una ofensiva que causó al menos ocho muertos y alcanzó un edificio residencial en el centro del país.
Las sirenas antiaéreas se activaron en la capital en el primer ataque contra la ciudad en casi dos meses, y la fuerza aérea ucraniana interceptó 11 misiles de crucero y dos aviones no tripulados sobre Kiev, según su gobierno municipal.
Durante el invierno boreal, los ataques rusos se centraron en la infraestructura básica y provocaron frecuentes cortes en el suministro de electricidad y agua corriente.
Ucrania se reforzó en los últimos meses con el envío de material occidental de defensa antiaérea, crucial para el esfuerzo de guerra del país. En abril, recibió los sofisticados sistemas estadounidenses Patriot.
Su capital fue blanco la semana pasada de un ataque con 12 drones de fabricación iraní, de los que ocho fueron abatidos. La acción no causó víctimas.
Después de 14 meses de guerra, los principales combates se desarrollan actualmente en el este del país por el control de la región industrial del Donbas y, especialmente, por la ciudad de Bakhmut, destruida casi por completo.
Ucrania dice estar preparando desde hace meses una confraofensiva para expulsar a las fuerzas rusas de los territorios que ocupan en el este y el sur del país.