Apenas se confirmó la noticia de la victoria de Luiz Inácio Lula da Silva en las elecciones presidenciales en Brasil, en un apretado ‘votofinish’ con Jair Bolsonaro, distintos líderes políticos en todo el mundo se han pronunciado para manifestar su inconformidad o su beneplácito por el regreso al poder del líder del Partido de los Trabajadores, quien otrora ya había ocupado ese cargo por dos periodos, entre 2003 y 2011.
La victoria de Lula significa que Brasil vuelve a dar un giro hacia la izquierda, tal como lo había hecho en años anteriores.
Una de las reacciones más esperadas era la del expresidente Álvaro Uribe, una de las figuras de derecha con mayor peso en la política colombiana.
En un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, Uribe aseguró que una de las claves para la victoria de Lula fueron los pobres y no la izquierda democrática, como se había dicho de parte de algunos analistas.
“En el resultado de Brasil incidieron los pobres, no la izquierda ideológica”, apuntó Uribe.
Sin embargo, el exmandatario también le mandó un contundente mensaje al nuevo presidente brasileño.
“Ojalá el presidente Lula no apoyé como en el pasado a los gobiernos antidemocráticos, castrochavistas, a los violentos y a sus secuaces financiados por la corrupción de Odebrecht”, indicó Uribe.