La red Comando Venezuela presentó este martes ante la OEA lo que considera pruebas irrefutables de que la oposición consiguió un triunfo electoral en las elecciones del 28 de julio.
Además, rechazó la versión del Consejo Nacional Electoral (CNE) de que sus sistemas fueron infiltrados por «hackers» durante el escrutinio de las elecciones del 28 de julio, como argumento para no presentar las pruebas y refutar la abultada evidencia de la oposición que reclama la victoria en las urnas.
Comando Venezuela, una organización integrada por miembros de la sociedad civil venezolana, tanto dentro del país como en el exilio, para hacer valer los resultados electorales del pasado 28 de julio en Venezuela, presentó estos argumentos en un informe técnico-electoral detallado que fue expuesto por el técnico de la red Gustavo Silva en Washington.
Tras la presentación Silva dijo a la Voz de América que la postura del CNE carece de todo fundamento, y que si el organismo rector de las elecciones venezolanas mostrara las actas de las auditorías previas podría comprobarse la falsedad de esa postura, ya que toda la transmisión de resultados va de un “punto A a un punto B”, en un circuito cerrado fuera de internet.
“Si la página web del Consejo Nacional Electoral estuviese al aire estarían las actas de las auditorias previas de producción de maquinas y de transmisión de datos, y de las auditorias que no se hicieron después”, afirmó el experto.
En el informe también se han incluido como anexos las actas “que fueron emitidas por el propio CNE” de las auditorías de cómo se procesarían los resultados, ya que “en Venezuela los resultados no se transmiten por internet, se transmiten a través de una red dedicada que hace imposible que pueda ser ‘hackeada’”, dijo.
Durante la presentación del informe asistieron algunos embajadores ante la OEA, como los jefes de misión de Chile, Perú, Uruguay, Ecuador, Argentina, entre otros. Todos recibieron el material entregado por Comando con Venezuela a la Secretaría de Fortalecimiento de la Democracia de la OEA.
Durante la presentación del informe, Silva, quien se ha exiliado ante la represión poselectoral, explicó cómo funciona el sistema de transmisión y los inviolables códigos de seguridad de las actas, que hacen imposible su manipulación.
Comando expuso que la abultada evidencia demuestra que la elección la ganó Edmundo González con una aplastante mayoría, como también lo han mostrado los videos compilados de los recuentos mesa por mesa aquella noche.
Entre las pruebas en físico presentadas durante la disertación, Comando Venezuela cuenta con copias de actas de centenares centros de votación y del registro manuscrito de los datos, que los jefes de mesa lograron compilar.
También mostró algunas tiras de papel impresas por las máquinas durante el conteo, cuyos resultados también coinciden con los de las actas.
Silva explicó que el azul del impreso de las tiras era parte de las normas de seguridad establecidas para la noche del escrutinio por parte del CNE. A eso se suman los códigos de barra infranqueables para hacer arqueo de los votos, como lo mostró en pantalla durante su exposición.
Todo eso indica, dijo, que es “imposible falsificar resultados” desde la oposición ante las medidas de seguridad establecidas por el propio CNE, que había establecido la cuestión técnica para dar fiabilidad a los resultados.
El secretario por la Democracia de la OEA, Francisco Guerrero, reconoció en el informe el “valor técnico” del banco de pruebas que amparan el informe.
Guerrero habló de su experiencia como miembro del Tribunal Electoral de México y dijo que es urgente que la comunidad internacional no quite la vista de la situación y que este informe es revelador como elemento técnico de pruebas.
“Dadas las difíciles condiciones actuales en Venezuela ,presentar el trabajo que realiza esta red conlleva un riesgo considerable para su integridad (…) Nos sentimos comprometidos con su esfuerzo”, dijo el secretario Guerrero.
El embajador de Uruguay ante la OEA, Washington Abdalá, fue el único representante que tomó el micrófono y dijo que en este momento es crucial «continuar apoyando al pueblo de Venezuela», que reclama un «auténtico triunfo en su voluntad popular» y que el tiempo es corto para «trabajar con la pasión» que amerita la situación.
El embajador Abdalá alertó al organismo que si el proceso de Venezuela culmina con lo previsto por su gobierno, otros países seguirán el ejemplo «y hay mucho en riesgo» para la región, apuntó.
El presidente del CNE, Elvis Amoroso, defendió que los recuentos de su sistema indicaban que con el 97 % de las actas procesado, Nicolás Maduro tenía 6,4 millones de votos y Edmundo González Urrutia contaba con 5,3 millones, con lo que el CNE adjudicó la victoria a Maduro con el 52 % de los sufragios.