El número de habitantes de China, el país más poblado del mundo, se redujo en unas 850.000 personas el año pasado, la primera vez que se registra un descenso en 61 años, según datos oficiales publicados hoy por la Oficina Nacional de Estadística (ONE) de la nación asiática.
Concretamente, China cerró 2022 con 1.411,75 millones de habitantes, lo que contrasta con los 1.412,6 millones que había en el país a finales del año anterior.
Según datos del Banco Mundial (BM), la última ocasión en la que China experimentó una contracción de su población fue en 1961, año en el que perdió unos 7 millones de habitantes en el marco de la gran hambruna provocada por la fallida campaña de industrialización conocida como Gran Salto Adelante.
La prensa oficial china ya se había hecho eco la semana pasada de la posibilidad de una reducción de la población basándose en las estimaciones de expertos en demografía, que achacaban la situación a una bajada del número de nacimientos, los cuales, según los datos publicados hoy, cayeron desde los 10,62 millones de 2021 a los 9,56 millones, un descenso de casi un 10 %.
La tasa de nacimientos por cada millar de habitantes cayó desde los 7,52 a los 6,77 en 2022, lo que supone, según el diario hongkonés South China Morning Post, la cifra más baja desde la fundación de la República Popular China, en 1949.
Las cifras de la ONE también reflejan un aumento de las muertes, que pasaron de 10,14 millones a 10,41 millones.
Según un funcionario de la ONE citado por el rotativo oficial Global Times, la encuesta de población en la que se basan estos datos se efectuó el 1 de noviembre, por lo cual las cifras de fallecimientos publicadas hoy no reflejarían un posible aumento de la mortalidad derivado de la retirada de las restricciones del ‘cero covid’, llevada a cabo a principios de diciembre, y la consiguiente propagación del coronavirus.
Cabe recordar que China reconoció recientemente que registró unas 60.000 muertes relacionadas con la covid entre el 8 de diciembre, la citada fecha de retirada de restricciones, y el pasado 12 de enero.
TENDENCIA A LA BAJA
Por su parte, se volvió a confirmar que el país está embarcado en una tendencia de envejecimiento, ya que el porcentaje de personas en edad de trabajar -de 16 a 59 años- se redujo del 62,5 % del total de la población hasta el 62 %, mientras que el de personas de 60 años o más pasó del 18,9 % al 19,8 %.
Las autoridades nacionales ya habían pronosticado que la población del país estaba encaminada a experimentar un crecimiento negativo antes de 2025.
Tras décadas imponiendo la política de un solo hijo y posteriormente ampliarla a dos, China permite desde 2021 a sus ciudadanos tener un tercer hijo, aunque la decisión no ha sido acogida con gran entusiasmo por la población, debido tanto a la carga económica que supone la crianza como a la prioridad que muchas mujeres deciden dar a su carrera laboral.
La tasa de fertilidad del gigante asiático cayó por debajo del nivel de reemplazo de 2,1 en 1992 y en 2020, hasta el 1,3, lo que ha hecho que diversas localidades del país anuncien políticas de apoyo o incluso subsidios para quienes decidan tener hijos.
Expertos internacionales han vaticinado que la vecina India, con una población de unos 1.380 millones de habitantes en la actualidad, superará a China en un futuro cercano para convertirse en el país más poblado de la Tierra.
«La población (de China) probablemente tenderá a la baja de aquí a los próximos años. Esto es muy importante, con implicaciones para el potencial de crecimiento y la demanda doméstica», indicó el economista jefe de Pinpoint Asset Management, Zhang Zhiwei, citado por South China Morning Post.
«China no puede basarse en los dividendos demográficos como motor estructural para su crecimiento económico. De aquí en adelante, la demografía será un viento desfavorable. El crecimiento económico tendrá que depender más del crecimiento de la productividad, impulsado por políticas gubernamentales», apostilló Zhang.