El primer ministro de Portugal, António Costa, transmitió su solidaridad a Turquía y Siria tras el terremoto de esta madrugada, que se ha cobrado cientos de vidas, y aseguró que el Ejecutivo luso está “disponible” para ayudar en coordinación con la Unión Europea.
“Fue con consternación que recibí la noticia del terremoto que ha golpeado Turquía y Siria. Mis pensamientos están con las familias de las víctimas y todos los afectados por este desastre. Portugal se solidariza con ellos y está disponible para ayudar, en coordinación con nuestros socios”, publicó Costa en su perfil de Twitter.
El ministro de Administración Interna luso, José Luís Carneiro, precisó que Portugal está “en diálogo” con las autoridades europeas para enviar ayuda a Turquía “en el marco del Mecanismo Europeo de Protección Civil”.
“En este momento ya hay 11 países que movilizaron medios para apoyar a Turquía en el marco del Mecanismo Europeo de Protección Civil. Nosotros también ya hemos transmitido nuestra disponibilidad a la Unión Europea para integrar ese equipo de apoyo” para el rescate y emergencias médicas, explicó Carneiro en declaraciones a periodistas en un acto en Coimbra (centro del país).
Por otra parte, Presidencia de la República lusa informó en un comunicado que el jefe de Estado, Marcelo Rebelo de Sousa, ha enviado “un mensaje solidario” a su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan.
Avanzó también que, “con las informaciones disponibles”, no hay constancia de “víctimas portuguesas ni en Turquía ni en Siria”.
El Ministerio de Asuntos Exteriores luso divulgó otro mensaje en Twitter en el que expresó la “total solidaridad al pueblo y gobierno de Turquía”.
En esa línea, el presidente del Parlamento portugués, Augusto Santos Silva, también publicó que transmite “toda la solidaridad con los pueblos turco y sirio”.
El terremoto de magnitud 7,7 que sacudió esta madrugada Turquía ha dejado ya más de 1.500 muertos, al menos 912 muertos y más de 5.300 heridos sólo en ese país, según informaron diversas fuentes.
En Siria, de momento hay otros 592 muertos y 1.508 heridos.
