Serbia no exportará armas a Ucrania ni permitirá el transporte de material bélico destinado a países en guerra a través de su territorio, declaró hoy el presidente serbio, Aleksandar Vucic.
«Controlaremos estrictamente a todos los comerciantes privados y estatales para que de ninguna manera nuestras armas vayan a las zonas de guerra y a los países que participan en los conflictos», dijo Vucic en rueda de prensa.
«Consideramos que es la única política responsable», indicó.
Vucic anunció que Serbia ha formado equipos que se dedicarán a los asuntos humanitarios como la recepción de las personas heridas en la guerra de Ucrania, así como de los refugiados y la solución de sus problemas en conformidad con los principios de la Unión Europea (UE).
El presidente serbio dijo que su país se sumó hoy a la resolución de condena contra la invasión rusa de Ucrania en la Asamblea General de la ONU.
«Por nuestra parte, es importante condenar la violación de la integridad territorial de cualquier país», indicó.
Aseguró que espera un gran aumento de presiones sobre Serbia porque no se ha sumado a las sanciones impuestas por Occidente a Moscú en represalia por la invasión militar rusa de Ucrania.
«Serbia está en una difícil situación, hoy menos que nunca hay entendimiento para la posición de Serbia en el mundo», dijo.
El país balcánico es candidato al ingreso en la UE pero mantiene buenas relaciones tradicionales con China y con Rusia, principal aliado de Serbia en la ONU y otras instituciones internacionales en la postura de no reconocer la independencia de su antigua provincia de Kosovo.
Serbia, además, depende casi en su totalidad del gas ruso, y la compañía rusa Gazprom es propietaria del 51 % de las acciones de la petrolera serbia NIS.
