El presidente ucranio, Volodímir Zelenski, EE. UU. y el Reino Unido han alertado en las últimas horas del posible uso de armas químicas en Mariupol, una ciudad asediada y en situación de catástrofe humanitaria.
La ministra de Exteriores británica, Liz Truss, ha explicado que se investiga el posible uso de agentes químicos en la zona, lo que supondría una “cruel escalada” del conflicto. Zelenski ha advertido este lunes de que su Gobierno se toma “con toda la seriedad posible” las amenazas de las fuerzas separatistas acerca de un potencial uso de armas químicas en la localidad.
El alcalde de la urbe, Vadim Boichenko, ha afirmado en una entrevista que al menos 10.000 civiles han muerto en el enclave, en el sudeste de Ucrania, tras más de seis semanas de asedio por parte de las fuerzas rusas. Mariupol es solo uno de los objetivos rusos en el este del país, donde el presidente ucranio, Volodímir Zelenski, ha pedido a los ciudadanos que se preparen para “operaciones aún mayores” y ha advertido de que decenas de miles de soldados rusos se preparan para atacar.
El Alto Representante de la UE, Josep Borrell, ha comunicado que la Unión Europea continuará aportando material militar a Ucrania ante el inicio inminente de la ofensiva rusa en la zona oriental del país. Así, la UE da prioridad a las armas sobre las sanciones, que “tienen efectos a medio y largo plazo”.