La primera dama surcoreana, Kim Keon-hee, ha instado a abandonar el consumo de carne canina en su país en una entrevista publicada hoy.
Kim, que vive con cuatro perros y tres gatos, argumentó en una entrevista con el rotativo Seoul Sinmun que Corea del Sur y China son las únicas grandes economías del mundo que aún consumen este tipo de carne.
«No consumir carne de perro es, al fin y al cabo, una expresión de respeto para el mejor amigo del hombre y también demuestra respeto por la vida», explicó Kim en la que ha sido su primera entrevista desde que su marido, el presidente conservador Yoon Suk-yeol, llegó al poder el pasado 10 de mayo.
La primera dama expresó su deseo de que el actual gobierno logre aprobar leyes que terminen con esta práctica y también normativas que castiguen más severamente el maltrato animal, afirmando que Corea del Sur tiene la «ley de protección animal más laxa» entre los países desarrollados.
El consumo de carne de perro en Corea del Sur ha caído enormemente en las últimas décadas a medida que han ido en aumento el número de hogares que poseen mascotas.
Sondeos de años recientes muestran que más de un 80 % de los surcoreanos nunca ha probado la carne de perro y no tiene intención de hacerlo, al tiempo que la mayoría de los grandes mercados de este tipo de carne han cerrado ya y el gobierno y diversas asociaciones han logrado clausurar muchas granjas y mataderos.
El anterior gobierno liberal estableció el año pasado un comité mixto para tratar de crear un «consenso social» sobre la necesidad o no de prohibir el consumo de carne de perro.
Aunque la mayoría de surcoreanos no ha comido nunca esta carne una encuesta del año pasado muestra que solo en torno a un tercio de la población está a favor de que se prohíba su consumo.