A precio de «gallina flaca» se ven obligados a vender sus cosechas los profuctores de Altagracia de la Montaña al no poder sacarlos de la parroquia por el mal estado de la vialidad.
Cesar Rodríguez, productor local, comenta que les ha tocado vender lo poco que produce a precio muy por debajo de lo que vale en el mercado, para poder obtener algo de ingresos y así poder subsistir a la crisis económica que atraviesa el país.
Altagracia es una de las siete parroquias que conforman el Municipio Guaicaipuro, debería ser una de las poblaciones con más recursos del municipio, debido a la abundante producción que debería generar. Pero la verdad es que por el olvido de los gobiernos municipales y regionales, desde hace aproximadamente 20 años, está tierra ha quedado en el olvido.
Sus habitantes recuerdan que todos los alcaldes que han pasado en las últimas dos décadas: Raúl Salmeron, Alirio Mendoza, Francisco Garcés y Wisely Álvarez, del PSUV, utilizaron en sus campañas a Altagracia asegurando que la convertirían en «motor productor» de la región.
«Llegan al poder y se olviden de las parroquias foráneas, lo mismo pasa con Paracotos, Tácata, San Pedro, Cecilio Acosta y hasta El Jarillo», reseñó Efrain Hurtado, quien apuesta el cambio para avanzar.
«Soy chavista, le di mi confianza a cuatro alcaldes del PSUV y nada, acá estoy más pobre que nunca, ya es tiempo de cambiar», puntualizó.
Orlando Montlouis #ElTequeño