El presidente de la Asociación de Profesores de la Universidad Simón Bolívar se referió consternado a la muerte de una jubilada y la hospitalización de su pareja por desnutrición.
«Con dolor, consternada, recibió la comunidad universitaria la noticia espantosa que ayer relató la muerte de una profesora universitaria jubilada y el traslado al hospital de otro colega, su pareja, con desnutrición. Si esto no nos conmueve a todos en el país será porque somos inmunes, insensibles, a la tragedia aguda que viven los universitarios y la gran mayoría de los venezolanos que tenemos la muerte decretada en los sueldos de miseria que no nos cansamos de denunciar permanentemente, así como somos sometidos al pleno abandono de las condiciones socioeconómicas todas: salud, vivienda, recreación, calidad de vida de la que carecemos por imposición de un régimen corrupto y criminal que nos garantiza únicamente la muerte como respuesta a una vida laboral intensa».
Prosiguió el dirigente gremial: «Desgraciadamente, el caso referido en la ULA. de dos jubilados de la tercera edad, no es el único cuadro deplorable, porque todos los universitarios hemos sido tirados al abandono laboral más mísero. Esto provoca desde luego el escape de los profesores y trabajadores, quienes huyen literalmente por sus vidas».
-Es, sin duda, un ataque desmesurado a los derechos humanos. En especial al derecho a la vida, al derecho a una vida digna sustentada con el trabajo. El régimen se burla con descaro de los universitarios y así, en ese abandono, llama a clases sin ningún tipo de condiciones, con la mas insólita irresponsabilidad, mientras mantiene preso a un universitario como Javier Tarazona, mientras mantiene en acoso permanente a todos los universitarios.
«Este hecho despreciable debe encender más el malestar ciudadano en Venezuela y seguir encendiendo las alarmas del mundo acerca de los crímenes que a contecen en Venezuela, dirigidos desde el poder contra la ciudadanía honesta que lucha a diario por su sustento y contra un régimen que genera espanto en lugar de tranquilidad, paz y sosiego en su población», puntualizó.