El 6 de abril el banco suizo Credit Suisse, publicó un análisis elaborado por el economista venezolano Alberto Rojas, en el que proyecta un crecimiento de la economía de Venezuela de 20% al cierre de 2022. Estas estimaciones se basan en el escenario que podría experimentar la producción y exportación petrolera del país, debido a la crisis energética mundial que ha provocado la guerra de Rusia y Ucrania, y las expectativas que han surgido tras la visita de representantes del gobierno de Estados Unidos a Venezuela, y la solicitud de la flexibilización de las sanciones a PDVSA y al gobierno de Nicolás Maduro.
Ana Uzcátegui | La Prensa de Lara
Para Oscar Doval, presidente de la consultora británica Moore Global, el pronóstico no está halado de los cabellos si Venezuela logra llevar su producción petrolera de 700 mil barriles diarios a 900 mil barriles a corto plazo. Sostiene que en 2022 el sector que experimentará un rebote económico de mayor magnitud será el de hidrocarburos, no así los demás sectores de la economía como el agro o industrias, que se mantendrán operando a una capacidad instalada de 30%.
Venezuela registró una caída del Producto Interno Bruto (PIB) del 80% en ocho años. En 2021 hubo un efecto rebote, tuvimos un crecimiento de 4%, bastante modesto a expensas del sector privado que se activó por las liberaciones de controles centrales y de controles de precios. Eso incentivó ligeramente la producción de materia prima, transformación de esa materia prima, así como la exportación de productos terminados, en un mercado reducido que no pasa de 10 millones de personas con capacidad de consumo. Este 2022 lo que veremos es una reactivación de los ingresos generados por el Estado, fundamentalmente el petróleo», explicó.
El país ha experimentado una leve recuperación de su industria petrolera en los últimos 16 meses, pasando de producir 300 mil barriles de petróleos diarios a inicios de 2021 a 700 mil barriles diarios desde diciembre del año pasado.
«Tenemos sanciones financieras y bloqueos comerciales que impiden la libre exportación de petróleo venezolano, para evadir tales sanciones el crudo se tiene que vender con descuentos del 30%. Se espera que con la flexibilización de las medidas por el conflicto Rusia-Ucrania, el bloqueo amaine un poco. Eso no significa que se van a levantar las sanciones, simplemente el bloqueo perderá intensidad. El oficialismo mantiene alianzas comerciales con el Medio Oriente y puede haber eventuales alianzas con empresas americanas si EE.UU otorga licencias para que Chevron explote la Faja del Orinoco. Eso puede estabilizar la producción petrolera a unos 900 mil barriles diarios o alcanzar el millón de barriles. Más de allí será difícil por la deteriorada infraestructura de la industria petrolera», recalcó.
Afirma que si esto se logra, Venezuela podría tener ingresos por conceptos de exportación por el orden de los 25 mil millones de dólares. El año pasado el país obtuvo ingresos de exportación de productos no petroleros de 15 mil millones de dólares . «Venezuela podría tener un PIB de 66 mil millones de dólares este año, según estimaciones de Moore Global», indicó.
Comunicó que la inversión que está teniendo Venezuela para lograr ese aumento de la producción de crudo proviene de aliados ideológicos del gobierno como Irán y China. «Si se está contando con que a Chevron le den una licencia sobre la explotación de la Faja del Orinoco tenemos petróleo a flor de piel, que es muy fácil de extraer y con muy poca inversión se puede aumentar la producción a 900 mil barriles diarios. Sólo se necesita una inversión de menos de mil millones de dólares», estimó.
Para leer la nota completa, pulsa aquí