Los reclamos por salarios dignos fue la principal causa de las protestas laborales registradas en Venezuela por el Instituto de Altos Estudios Sindicales (Inaesin) en el mes de mayo de 2023, mes en el que contabilizaron un total de 97 conflictos laborales. En su más reciente reporte, el Inaesin dijo que los reclamos por reivindicaciones salariales coparon el 71.88% de las protestas en mayo; seguidos por reclamos por condiciones de trabajo, con 9.38%; acoso laboral, con 8.33%; y convenciones colectivas, con 4.17%.
Asimismo, el Inaesin indicó que el mayor porcentaje de conflictos fue protagonizado por trabajadores del sector educativo con 36.08% del total del mes. En segundo lugar, se encuentra la categoría «otros», que concentra varios sectores sindicales que actúan conjuntamente en los conflictos laborales, con 24.74%; y en tercer lugar se ubican los trabajadores de la salud, con 19.54%.
De igual manera, los empleados públicos fue el sector laboral que más protestó en mayo, con participación en el 94.84% de las protestas; en tanto que los sindicatos tuvieron presencia en 47.23% de las protestas.
El Inaesin también señaló que el 66.67% de las protestas fueron denuncias; el 15.62% marchas y el 9.38% concentraciones.
Con un indicador anualizado de 458% al mes de mayo, la economía venezolana tiene una de las tasas de inflación más altas del mundo, que aunado a la constante devaluación del bolívar han hecho que los salarios pierdan su poder de compra y se ubiquen entre los más bajos de Latinoamérica; de hecho, Venezuela tiene el salario mínimo más bajo de la región, que actualmente se ubica en unos $5.
La tasa de inflación en el mes de mayo registró un 7.6% triplicando la del mes anterior, abril, cuando marcó 2.5%, según informó el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), un organismo independiente que registra el alza de los precios en Venezuela.
«En medio de una economía con evidentes signos de contracción, la tasa de inflación no da tregua», dijo el OVF, que añadió que la inflación acumulada en 2023 llega a 84.9% y la anualizada a 458%.
En abril, una familia de tres miembros en Venezuela requería de 69 salarios integrales (salario mínimo más bono de alimentación) para adquirir una cesta de 61 bienes y servicios, lo que equivale a un poco más de dos salarios integrales por día, reportó el Centro de Difusión del Conocimiento Económico (Cedice), un asociación sin fines de lucro.
En su reciente reporte «Inflaciómetro», elaborado por su Observatorio de Gasto Público, Cedice afirmó que el costo de la vida en Venezuela continuó elevándose, tanto en la moneda local -el bolívar- como en dólares. El país caribeño vive una dolarización de facto, estimulada desde el régimen chavista de Nicolás Maduro, si bien las autoridades económicas la han mantenido limitada.