La Presidencia de Rusia destacó este martes que las autoridades se están preparando para el peor escenario respecto a la variante ómicron del coronavirus, después de confirmar la semana pasada los primeros casos en el país.
«Es mejor confiar en lo mejor, pero preparase para lo peor. Probablemente, este debería ser nuestro credo», ha dicho el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, según ha recogido la agencia rusa de noticias Sputnik.
En este sentido, resaltó que Rusia está preparado para soportar «una presión extrema sobre el sistema sanitario» y ha matizado que, debido a que la variante no ha sido investigada por completo, no se puede determinar con precisión el nivel de amenaza que representa. «Es una mutación nueva y una amenaza nueva», dijo.
El centro operativo nacional para la lucha contra el coronavirus señaló este mismo martes que durante el último día se han confirmado 28.353 casos y 1.145 muertos por coronavirus, lo que eleva los totales a 10.074.797 y 291.749, respectivamente.
San Petersburgo ha sido la ciudad con más casos notificados, con 1.989, seguida por Moscú, con 1.976, y la provincia de Moscú, con 1.945. Por su parte, Moscú sumó 89 fallecidos, por los 62 de San Petersburgo y los 52 de la provincia de Moscú.
Por otra parte, el organismo manifestó que 34.084 personas recibieron el alta médica durante las últimas 24 horas, con lo que el total de recuperados asciende a 8.804.000, mientras que la Oficina Nacional de Protección al Consumidor (Rospotrebnadzor) ha manifestado que más de 1,6 millones de personas están bajo observación como posibles casos.