El embajador de Rusia ante Naciones Unidas, Vasily Nebenzya, volvió a insistir ante el Consejo de Seguridad en que las masacres de Bucha han sido “falseadas”.
Nebenzya habló de «flagrantes inconsistencias» en el relato de los medios ucranianos y occidentales. “Los cadáveres no estaban ahí cuando se retiraron las tropas rusas”, dijo al tiempo que aseguró que eso lo demostraban numerosos videos.
Sin embargo, las imágenes satelitales evidencian la presencia de muertos en las calles incluso dos semanas antes de la retirada de las tropas rusas.
Dirigiéndose al presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, Nebenzya dijo que Moscú colocaba en su conciencia las «infundadas acusaciones contra los militares rusos, que no han sido confirmadas por ningún testigo». Numerosos periodistas occidentales han podido hablar con sobrevivientes que relatan los horrores vividos durante las semanas de ocupación.