Las autoridades ucranianas han denunciado este lunes una serie de explosiones causadas por las tropas rusas en las inmediaciones de la central nuclear de Zaporiyia. La empresa estatal que opera las plantas nucleares de Ucrania, Energoatom, ha alertado de que los hechos han tenido lugar en una instalación militar cerca de la planta, y ha apuntado que el personal de la instalación había abandonado sus puestos de trabajo antes del incidente.
«Planean seguir realizando explosiones en la instalación nuclear más grande de Europa (…) ¿Qué otros ataques terroristas se necesitan para que los socios, incluido el OIEA, tomen medidas decisivas?», han lamentado desde la empresa pública. Según apunta la agencia de noticias ucraniana UNIAN, por el momento se desconoce si la explosión ha podido afectar a los niveles de radiación de la zona.
El pasado 21 de febrero, Vladimir Putin reconoció a Donetsk y Lugansk como repúblicas independientes. Estos territorios, mayoritariamente rusoparlantes, son considerados como ucranianos por parte de Kiev y gran parte de la comunidad internacional, sin embargo, Rusia ha esgrimidos argumentos históricos para calificarlos como naciones autónomas.
La crisis entre ambos países empeoró, tras la orden del Kremlin de invadir esa zona, con la intención de «pacificar y mantener la paz».
Tres días después, inicio de la operación militar con la excusa de «proteger» a la población rusa en esas regiones controladas desde 2014 por las milicias separatistas prorrusas apoyadas por Moscú.