El nuevo coronavirus covid-19 ha evolucionado a tal punto que podría afectarnos mentalmente. Un análisis publicado en The Lancet, que se encargó de revisar los efectos psicológicos de diferentes epidemias como el SARS, MERS, ébola y la influenza AH1N1, determinó que el sentimiento de pérdida provocado por la cuarentena puede afectar la salud mental y que los efectos psicológicos más comunes del confinamiento incluyen síntomas de confusión, estrés postraumático y enojo. ¿Cómo lidiar con la ira?, ¿Es posible hacerlo durante la pandemia? Sí, y una especialista dice la manera de conseguirlo.
Wilma Dagher, oradora motivacional, asegura que el aumento de estos ataques de enojo en el hogar son provocados por los roces propios del confinamiento, “pero si queremos que en estos momentos las experiencias sean positivas, tenemos que mirarlo como una oportunidad de compartir en familia, esto no quiere decir que cambies completamente tu rutina, lo que tienes que cambiar es el chip”.
Recuerda que los seres humanos “somos emocionales y como tal siempre vamos a reaccionar de forma positiva o negativa y la ira es una de ellas, es una emoción negativa, donde la persona reacciona de forma violenta ante algo que le molesta, puede ser una injusticia, una ofensa o algo que le incomoda”.
Agrega que “no podemos andar por la vida sin control, gritando, golpeando e insultando a las personas, la ira se desata porque cada día la vamos alimentando con nuestros pensamientos, y cuando explota la persona no sabe lo que dice ni hace y luego se arrepiente, explotamos porque simplemente no nos comunicamos y vamos acumulando sentimientos hasta que no podemos más”.
Dagher advierte que hay una ira que es muy peligrosa: la oculta, “una persona puede pasar años acumulándola en lo más profundo de su ser, sin abrir la boca y la va a alimentando de rabia y el resultado es una explosión incontrolable”.
-El primer paso es aprender a hablar, si explotamos y no escuchamos no existe el entendimiento entre las partes. En un ataque de enojo si una persona sufre del corazón puede morir, porque aumenta el ritmo cardiaco, puede subir la presión arterial, hay agitación y taquicardia.
“Son muchas las lecciones de vida que la pandemia nos ha dejado, la ira sí se puede manejar pero siempre va a haber una limitante, lo importante es saber que cuando es incontrolable hay que buscar ayuda”, agrega.
Para controlarla recomienda primero buscar la raíz del problema “una persona puede haber sido maltratada físicamente, psicológicamente, pueden haber sido decepcionada, traicionada y hay que buscar la raíz que de todo. Luego hay que ayudarlo a valorarse, que sienta que es un gran ser humano y tiene un gran potencial”.
Recomienda nunca enfrentar a una persona cuando está en un ataque de ira “es mejor guardar silencio hasta que se calme porque puede ser violento y peligroso, en las guarderías se usa la técnica de cuando un niño tiene un berrinche se busca llamar su atención hacia otra cosa y termina olvidando la razón por la que estaba enojado”.
Pide igualmente aprender a escuchar a las personas “porque a veces estallan porque se sienten ignorados y como toda emoción la ira hay que aprender a controlarla”.
Wilma Dagher cuelga dos veces a la semana – miércoles y domingo- videos en su cuenta en Instagram @dale_likeALaVida en la que aborda este y otros temas de interés. Igualmente puede escucharla todos los jueves a través de Radio Mía 105.7Fm en el programa “Pola y Murolo a las 12”.
Daniel Murolo #ConexionLosSalias