¿Nido vacío? Este es el nombre de un síndrome que hace alusión a la sensación de tristeza, anhelo de pérdida y dolor que tienen los padres cuando los hijos se independizan del hogar familiar.
En vista de que se acercan las celebraciones de Navidad y Año Nuevo, es posible que comiences a presentarse los sentimientos de nostalgia, por lo que abordaremos este tema en específico.
¿Qué es el síndrome del nido vacío?
Se define como el síndrome de nido vacío al conjunto de pensamientos y emociones que experimentan los padres cuando sus hijos se van de casa, es una respuesta emocional ante la ausencia del hijo adulto que abandona el hogar.
Cuando esto ocurre, el síntoma principal que se evidencia es una sensación de tristeza que puede incluso llegar a causar depresión.
Síntomas
Generalmente, pueden presentarse después de una semana o algunos meses y estos son:
– Tristeza
– Sensación de no tener rumbo ni nada que hacer
– Aburrimiento constante
– Deseos de llorar con frecuencia y por largo tempo
– Recuerdos constates de la infancia de los hijos y deseos de hablar frecuentemente de ellos
– Sentir que la vida perdió el sentido
– Irritabilidad
– Dolor de cabeza
– Mareos
– Insomnio
Cabe acotar que, si los síntomas se prolongan por más de seis meses, y comienza a afectar de manera negativa y va en deterioro de la calidad de vida de la persona, es posible que necesite ayuda de un profesional de la salud mental.
Consecuencias
Es necesario prestarle atención a lo que se está sintiendo pues el síndrome puede afectar de manera negativa a la calidad de vida de quienes lo padecen, pues experimentan un dolor emocional constante.
Además, es posible que la tristeza le lleve a aislarse socialmente, sientan desesperanza, soledad, debilidad, en ocasiones se presenten malestares físicos, dependencia emocional y trastornos de ansiedad.
Incluso, cabe la posibilidad de que comiencen a beber alcohol y fumar, dejen de comer, entre otros síntomas que pueden ser dañinos y ante lo que se recomienda recibir tratamiento psicológico.
¿Qué hacer?
1. Anticiparse a la partida de los hijos siempre resulta lo mejor, es decir, si aun tus hijos están en casa, pero ya tienen edad para formar su propio hogar, debes ir preparándote mentalmente para cuando llegue el momento.
Una buena idea es comenzar a hacer una actividad que te ayude a ocupar el tiempo libre.
2. Acepta que este es un proceso natural y que, así como dejó de necesitar que le ataras los zapatos, por ejemplo, también dejará de necesitar que seas su soporte, para él o ella, ser el soporte de alguien más.
3. Aprovecha el tiempo para compartir con la pareja, familiares y amigos. Enfocarse en estas relaciones y disfrutar de algunas actividades ya que los hijos no están puede ser beneficioso.
4. Hablar siempre ayuda, desahógate para aliviar tus tristezas.
5. Mantener una sana comunicación con los hijos ayuda a aliviar los sentimientos de nostalgia. Con ello no se quiere decir que le llamarás a diario las 24 horas del día, pero si conversar una vez al día les ayudará a sentirse que aun están presentes.
Con información de 2001