Funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) impidieron que periodistas le dieran cobertura al derrame petrolero que afecta las playas del estado Carabobo, en el norte de Venezuela.
Las periodistas Ruth Lara Castillo y María Torres, así como el reportero gráfico Juan Carlos Hernández, fueron detenidos por la Dgcim cuando se encontraban cubriendo el derrame, que se originó el martes en la refinería El Palito, uno de los complejos petroleros más importantes del país.
Los funcionarios obligaron a los periodistas a borrar el material que habían grabado, incluso de las papeleras de sus teléfonos, y luego los dejaron ir.
La denuncia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) fue respalda por la Federación Internacional de Periodistas (FIP), que calificó la acción de la Dgcim como una “clara violación de la libertad de expresión”.
Derrame que la DGCIM no quiere que se registre
Por su parte, la organización Gente del Petróleo, que agrupa a extrabajadores de la industria petrolera, aseguró que la fuga de hidrocarburos comenzó el martes en la laguna de oxidación de la refinería El Palito, a causa de las lluvias constantes.
“La playa se llenó de hidrocarburo, está toda contaminada”, dijo Beatriz García, coordinadora de la agrupación, quien destacó la importancia de que las autoridades expliquen si hubo una falla en el sistema de drenaje.
En las redes sociales circulan numerosas fotografías y vídeos que muestran la orilla del mar ennegrecida así como a personal de Pdvsa trabajando en la limpieza de una playa que, según medios locales, está cerca de la refinería.
La Fundación Azul Ambientalistas aseguró que este “desastre ambiental” perjudica los balnearios de Puerto Cabello, una zona turística ubicada a unos 200 kilómetros de Caracas.
Constantes derrames en Venezuela
El derrame petrolero en Carabobo es el último de una serie de incidentes similares que han afectado a Venezuela en los últimos años. En junio pasado, la ONG Observatorio de Ecología Política (OEP) indicó que el país registró 86 derrames petroleros durante el 2022, tres de ellos en el estado Carabobo.
La falta de transparencia de las autoridades venezolanas sobre estos incidentes, así como la censura a los periodistas que intentan cubrirlos, ponen en duda las posibilidades de que se investiguen y sancionen a los responsables.