La suspensión por parte de la Gobernación de Miranda del operativo de entrega de combos proteicos a los jubilados, generó malestar entre cientos de mirandinos de la tercera edad que hicieron hasta 7 horas de cola en vano.
La falta de organización y la improvisación generó caos entre las personas que madrugaron en el Club Centro de Amigos de Los Teques para recibir el combo.
Los afectados denunciaron que aunque las autoridades abrieron previamente un lapso para que los jubilados autorizarán el descuento de la nómina de 7 mil 500 BsS e informaron que iban a aceptar autorizaciones para que un familiar los retirara, el mismo día del operativo decidieron no permitir las autorizaciones.
«Tuvimos que salir corriendo a buscar a los abuelos para que pudieran retirar la comida, luego de soporta de pie, bajo el sol, suspendieron el operativo ante el caos generado», narró uno de los afectados.
Aseguran que el desastre fue generado en buena medida por tres mujeres inexpertas encargadas de atender a unas 3 mil personas. «Por tratarse de una población con edades por encima de los 60 años, la mayoría autoriza a familiares porque no se pueden movilizar para esos operativos por enfermedad, por lo que es inhumano obligarlos a soportar tantas horas de espera», agregó.
Denunciaron igualmente que no había efectivos de Protección Civil ni Bomberos de Miranda que pudieran atender a los tres abuelos que se desmayaron durante la agotadora jornada de espera.
Alertaron sobre la insalubridad en la que son temporalmente almacenados los alimentos antes de ser entregados, «el pollo al aire libre, sin refrigeración, llevando tierra y sol, al igual que el resto de la comida», dijeron.
Daniel Murolo