Este lunes, el teniente coronel Igbert Marín Chaparro cumple 14 días de huelga de hambre en el sótano de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), donde se encuentra detenido desde mayo de 2018.
Este oficial decidió radicalizar su protesta para pedir la presencia de representantes de la ONU, Cruz Roja y de la Conferencia Episcopal Venezolana en los calabozos del régimen chavista.
De acuerdo con la defensora de los derechos humanos, Tamara Suju, Chaparro exige el cese de la tortura y los tratos crueles en la denominada «Casa de los sueños» y un traslado a la cárcel de Ramo Verde.
Marín Chaparro era comandate del Batallón Ayala y fue detenido en marzo de 2018 luego de protestar por las malas condiciones en las que vivían sus subalternos.