En 46 empresas públicas regionales, de un total de 218, se han registrado denuncias por corrupción o malos manejos, según un estudio de Transparencia Venezuela publicado el lunes 14 de febrero.
Las denuncias por corrupción han ocurrido principalmente en las empresas de distribución de gas (9), transporte (8), agroalimentario (7), construcción (7), minería (5) y comercio (4).
Según explica la ONG, el abuso de poder en la distribución minorista de gas ocurre en un contexto de graves problemas de escasez y precios subsidiados que incentivan al mercado negro, que funciona con sobreprecios, privilegios para allegados y uso del servicio para campañas electorales a favor del gobierno.
En cuanto al transporte, hay denuncias por irregularidades en los procesos de compra de lubricantes, repuestos y vehículos, nóminas fantasma y casos de peculado de uso, especialmente en campañas electorales y durante las elecciones.
Las irregularidades en los centrales azucareros es lo que destaca en el sector agroalimentario: la ONG menciona el estancamiento en la cadena de producción por falta de insumos y prácticas clientelares en la distribución de alimentos.
Transparencia Venezuela detalló que las gobernaciones participan principalmente en las actividades del sector agroalimentario, donde hay 42 empresas (19% del total de las regionales). Le siguen el sector construcción (34 empresas), comercio (28) y, con porcentajes similares de participación, las empresas de venta de gas doméstico, sector financiero, explotación de minerales no metálicos y transporte (alrededor de 7%).
Subrayó la organización que en las empresas regionales hay prácticas como la opacidad, la falta de rendición de cuentas y los usos con fines políticos. Además, los portales web de las gobernaciones operativos no contienen información completa sobre los entes con fines empresariales, que solo son mencionados con fines propagandísticos.
“La base de datos en Vendata muestra vacíos porque no fue posible acceder a información de las EPE regionales en relación con, entre otras variables, sus autoridades (80%), fecha de creación (66%), composición accionarial (65%) y situación patrimonial (100%)”, denunció Transparencia Venezuela.
El mes pasado Transparencia Internacional alertó que Venezuela sigue siendo uno de los países más corruptos de América Latina.
Según el Índice de Percepción de la Corrupción (CPI) de 2021, también ha crecido la corrupción en Centroamérica, donde avanza el autoritarismo, y no hay mejoras en democracias consolidadas como Chile.
Prácticamente ningún país puede presumir de mejoras importantes en estos últimos 10 años en los que se lleva publicando el índice, puesto que la gran mayoría apenas han registrado avances o incluso han retrocedido en la clasificación que TI elabora cada año.
A la cabeza repitieron Uruguay y Chile, con 73 y 67 puntos, respectivamente, sobre un máximo de 100, mientras que Venezuela (14) y Nicaragua (20) siguen siendo los países más corruptos de la región según ese índice.
Del resto, el único que aprueba es Costa Rica, con 58 puntos, al que siguen Cuba (46), Colombia (39), Argentina, Brasil (38), Ecuador, Panamá, Perú (36), El Salvador (34), México (31), Bolivia, República Dominicana, Paraguay (30), Guatemala (25) y Honduras (23).
