Practicar el «trueque» con algunos individuos que frecuentan la zona buscando obtener productos frescos aplicando la llamada “viveza criolla” es común en la población de Altagracia de la Montaña. Un ejemplo de esto es el cambio de un saco de 20 kilos de yuca por 1 kilo de pasta.
Por otra parte, individuos llegan al lugar para comprar plátanos y cambures, pagando el kilo en tan solo 100.000 Bs para luego venderlos en Los Teques hasta 10 veces por encima del costo. Esta es la realidad del campesino guaicaipureño.
«El sueño de Chávez aquí se hizo realidad», agrega visiblemente frustrado Alberto Calderón, tras asegurar que son cada día más pobres.
Narra que intercambiar incluso los pocos productos que trae la llamada «caja Clap» es otra manera de acceder a artículos que no venden en la población.
«Aceite, azúcar, mantequilla, son cosas que la fulana caja esa dejó de traer, se la sacan en el camino para revenderla, entonces quienes consiguen estos productos te los cambian por varios e incluso la caja entera», dijo.
Narró que hace mucho tiempo que ninguna autoridad de la Alcaldia de Guaicaipuro visita la población. «Ahorita que se vienen elecciones uno comienza a ver candidatos, son en época electoral vienen», dijo.
«Vi que hay un candidato a la alcaldía que orgullosamente dice ser comunista y prosovietico, que se mude para Altagracia de la Montaña y disfrute del socialismo decadente que pregona», puntualizó.
DM – Foto: @orlando_montlouis