El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió este jueves que impondrá aranceles “mucho mayores” a Canadá y a la Unión Europea (UE) si, según él, ambas partes colaboran para dañar económicamente a su país. La declaración se produjo a través de su plataforma Truth Social, en medio del creciente conflicto comercial con sus principales socios económicos.
“Si la Unión Europea colabora con Canadá para perjudicar económicamente a EEUU, se impondrán a ambos aranceles a gran escala, mucho mayores que los previstos actualmente, ¡para proteger al mejor amigo que cada uno de esos dos países ha tenido jamás!”, escribió Trump.
Horas antes, el mandatario anunció nuevos aranceles del 25% sobre vehículos y piezas clave para su fabricación importados de distintos países, una medida que entrará en vigor el 2 de abril. Las autoridades canadienses y comunitarias criticaron de inmediato la decisión del líder republicano.
En Canadá, el primer ministro Mark Carney calificó los aranceles como un “ataque directo” a los trabajadores y convocó una reunión del gabinete de relaciones Canadá-Estados Unidos para este jueves.
También informó la creación de un “fondo de respuesta estratégica” por 2.000 millones de dólares para proteger los empleos en el sector automotor, fortalecer la cadena de suministro nacional y apoyar la formación de trabajadores, según el canal de noticias CBC News.
Desde Bruselas, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, manifestó su “profunda” preocupación por la nueva política arancelaria que desea imponer Washington. Indicó que el bloque “evaluará” una respuesta no solo a esta medida, sino también a los “aranceles recíprocos” que el gobierno estadounidense prevé anunciar el mismo 2 de abril.
“La Unión Europea seguirá buscando soluciones negociadas que salvaguarden al mismo tiempo sus intereses económicos. Protegeremos conjuntamente a nuestros trabajadores, empresas y consumidores en toda la Unión Europea”, declaró Von der Leyen.
El comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic, concluyó recientemente su segundo viaje a Estados Unidos sin lograr un acuerdo que permita desactivar la disputa comercial. No obstante, aseguró que mantiene abierta la vía del diálogo, aunque reconoció que aún queda “trabajo duro” por hacer.
La Comisión Europea tenía previsto activar un primer paquete de contramedidas arancelarias por 8.000 millones de euros el 1 de abril, con base en un listado elaborado en crisis comerciales anteriores. Un segundo conjunto de aranceles, por 18.000 millones de euros adicionales, estaba programado para el 13 de abril.