El ejército ucraniano informó este miércoles de nuevos «éxitos parciales» en la localidad de Klishchivka, al sur de Bajmut, y anunció que sus tropas siguen repeliendo las ofensivas rusas en Limán, Avdivka y Márinka, situadas también en el frente del este.
«Vemos éxitos parciales en la zona de Klishchivka», dijo el portavoz del Estado Mayor ucraniano, Andrí Kovalov, que explicó también que las fuerzas ucranianas están afianzándose en el terreno que han conseguido recuperar en esa parte del frente.
Kovalov confirmó que las operaciones ofensivas ucranianas continúan también al norte de la ciudad de Bajmut, ocupada en su práctica totalidad por los rusos.
Según el portavoz militar del Estado Mayor ucraniano, las fuerzas rusas están movilizando reservas para hacer frente a las operaciones ucranianas y sufren cuantiosas pérdidas.
Ucrania dio por comenzada hace más de un mes su contraofensiva y está llevando a cabo acciones de ataque en la zona de Bajmut y en otros dos puntos del frente situados más al sur, en las provincias de Donetsk y Zaporiyia.
Explosivos en la planta nuclear
Precisamente sobre esa última ciudad, las tropas de Putin negaron haber instalado explosivos en la central nuclear.
con el presunto objetivo de detonarlos y aseguró que es Kiev el que planea un «sabotaje» en la instalación atómica.
«¿Para qué íbamos a tener explosivos allí? Es un sinsentido dirigido a mantener la tensión en torno a la planta», dijo el asesor de Rosenergoatom, la operadora rusa de las plantas nucleares, Renat Karchaa.
Según Karchaa, citado por la agencia Interfax, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, «miente descaradamente», cuando afirma lo contrario.
«Minar el techo de las unidades (energéticas) es una amenaza, no podemos permitírnoslo. Alguien en este caos necesita mantener la cordura», aseguró Karchaa.
Zelenski escribió anoche en Telegram que existe información de que las tropas rusas habían colocado «objetos parecidos a explosivos en el techo de varias unidades de energía de la planta nuclear de Zaporiyia».
EFE