La justicia sigue estrechando el cerco sobre la red criminal liderada por José Youssef Boutros. Adriana Mata, corredora inmobiliaria y pieza clave en las operaciones fraudulentas de la organización, fue aprehendida el día de ayer lunes 02 de diciembre de 2024, puesta a la orden de los tribunales y el juez de la causa ordenó su reclusión preventiva en el Instituto de Orientación Femenina (INOF) en Caracas.
Las autoridades la vinculan con múltiples estafas millonarias, blanqueo de capitales y asociación para delinquir, delitos que se enmarcan en el escandaloso caso que ha sacudido el mercado inmobiliario y que acarrea múltiples víctimas en Caracas y en toda Venezuela, a quienes les quitaron dinero por un rendimiento que nunca existió, o los despojaron de sus bienes inmuebles con la promesa de venderlos por precios más elevados con rendimientos fuera de mercado.
Mata, es señalada como la estratega inmobiliaria del grupo. El Ministerio Público confirmó que Mata operaba de la mano de Boutros, considerado el cerebro detrás de un complejo entramado criminal. Ambos habrían colaborado en operaciones clave como la venta fraudulenta de terrenos en el este de Caracas, donde las víctimas perdieron más de dos millones de dólares sin recibir títulos de propiedad.
Mata, es señalada como la estratega inmobiliaria del grupo. El Ministerio Público confirmó que Mata operaba de la mano de Boutros, considerado el cerebro detrás de un complejo entramado criminal. Ambos habrían colaborado en operaciones clave como la venta fraudulenta de terrenos en el este de Caracas, donde las víctimas perdieron más de 2 millones de dólares sin recibir títulos de propiedad.
La hoy detenida enfrenta cargos por estafa, asociación para delinquir y legitimación de capitales, previstos en el Código Penal y la Ley Contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo. Estos delitos podrían acarrear una condena de 8 a 10 años de prisión, reflejando la gravedad del impacto económico y social de las acciones de Mata y sus cómplices. El tribunal de la causa también ha dictado medidas cautelares para bloquear sus cuentas bancarias e incautar propiedades relacionadas con el caso.
Paralelamente, Boutros sigue prófugo, y protegido por ciertos personajes de la sociedad venezolana, quienes alegan que no puede ir preso porque sino no les pagará su dinero, mientras las autoridades intensifican los operativos para capturarlo, teniendo indicios de que anda escondido en Caracas. Su socio Erick Jesús Vaamonde Figueroa también está siendo buscado activamente.