El incendio iniciado el jueves por la caída de un rayo sobre depósitos de combustible en la ciudad cubana de Matanzas ha provocado a última hora de este domingo el derrumbe de un segundo tanque, cuyo colapso ha provocado una potente explosión visible desde distintos puntos de la isla, incluida la capital, La Habana.
El gobernador de Matanzas, Mario Sabines Lorenzo, ha confirmado el derrumbe del segundo de los tres tanques afectados, así como el vertido de crudo a las zonas aledañas, según la prensa oficial. En pie sigue, sin embargo, el tercero de estos almacenes, si bien la situación sigue sin estar controlada tras unas 40 horas de llamas ininterrumpidas.
Las autoridades del régimen cubano mantienen en uno el balance provisional de un fallecido, mientras que otras 15 personas permanecen desaparecidas y cinco de los 24 pacientes hospitalizados se encuentran en estado crítico, según el recuento actualizado por el Ministerio de Salud Pública de la dictadura.
La zona residencial más cercana a los depósitos, situados en el puerto de superpetroleros de Matanzas, permanece evacuada por precaución y no se descarta que pueda ampliarse el radio si la situación empeora. El régimen sí ha descartado peligro para la ciudad en su conjunto.
Una enorme columna de fuego de varias decenas de metros se ha elevado súbitamente de la zona del siniestro minutos antes de la medianoche (4.00 GMT), como transmitió la televisión cubana.
El impacto de un rayo ocasionó un impresionante incendio en un depósito de combustible en Cuba
Según informaron medios oficiales, los esfuerzos de los equipos de emergencia -cubanos e internacionales- para contener las llamas en los dos primeros depósitos afectados no ha tenido éxito. La infraestructura tiene en total ocho depósitos de 50.000 metros cúbicos cada uno.
Las llamas han alcanzado al tercer depósito, que había sido refrescado con agua de mar durante gran parte de este domingo, casi a la vez de que colapsase a causa del incendio el segundo tanque afectado.
Poco antes los equipos de emergencia se habían retirado de la zona del siniestro luego de que un fuerte viento impidiese su labor y avivase las llamas.
DAMNIFICADOS
El Ministerio de Salud Pública (Minsap) de Cuba indicó en su último informe que el incendio ha dejado hasta el momento un muerto y 122 lesionados, de los que cinco permanecen en estado crítico, tres están graves y 16 reciben cuidados (el resto han sido dados de alta).
Los desaparecidos son principalmente bomberos que fueron sorprendidos por la explosión del segundo depósito cuando estaban trabajando en primera línea para atajar el fuego en el primero. La recuperación de los cuerpos no comenzará hasta que se extingan las llamas, explicó el régimencubano.
Además, unas 5.000 personas han sido desalojadas de viviendas de repartos de Matanzas situados en las proximidades del parque industrial.
El incendio se declaró sobre las 19.00 hora local (23.00 GMT) del viernes, según las primeras hipótesis cuando un rayo impactó en la base de depósitos de combustibles y sobrepasó las capacidades del sistema de pararrayos.
Esa misma tarde explotó el primer depósito, con unos 25.000 metros cúbicos de petróleo, y sobre las 7.00 hora local (11.00 GMT) prendió el segundo, con una cantidad indeterminada de fuel.
La llamas se han llegado a elevar varias decenas de metros, tiñendo el cielo de la cercana Matanzas de rojo, y la enorme columna de humo negro ha alcanzado La Habana, a más de 100 kilómetros de distancia.
(Con información de Europa Press y EFE)