La leve recuperación económica que está registrando Venezuela luego de haber perdido el 75% del tamaño de su Producto Interno Bruto (PIB), entre 2013 y 2021, ha hecho que algunos sectores como el comercio y la agroindustria vuelvan a requerir demanda laboral, pero la oferta del mercado sigue siendo ínfima para la cantidad de personas que buscan un empleo formal. Así lo demostró Expoempleo desarrollada del 5 y 6 de agosto por la organización Pitágoras en Barquisimeto, donde se postularon 10.900 personas para 650 cargos que requerían 21 empresas privadas de Lara.
Por Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA
Luis Marín, licenciado en administración y director de Pitágoras, explicó que el aumento de la demanda de empleo fue de 263% en el tercer trimestre del año, en comparación a la Expoempleo que realizaron en febrero en Palavecino, o la desarrollada en Acarigua, Portuguesa en noviembre de 2021, donde máximo se postularon 3000 personas en cada evento. “Hace seis semanas acudieron personas de todas las edades para cargos que van desde gerentes, analistas, personal administrativo, técnicos y obreros. La edad promedio de los aspirantes era de 30 a 31 años, y también hubo un grupo de personas de 40 a más de 50 años de edad ávidos de trabajo. Las aspiraciones salariales de la mayoría eran de 200 a 400 dólares al mes”, comunicó.
Gerardo Álvarez, economista y asesor financiero de Fedecámaras y la Cámara de Comercio de Lara, informó que en los últimos nueve años el empleo en Venezuela se ha trastocado. En la actualidad ya no se ven largas colas de personas en las sedes de ministerios, alcaldías, gobernaciones u otras instituciones públicas buscando empleo, porque los salarios que paga el Estado no cubren las necesidades básicas. Algunos cargos devengan un salario mínimo integral que apenas 21 dólares al mes. Afirma que en estas precarias condiciones se encuentran unos 2.5 millones de personas que integran las nóminas del sector público.
En el sector privado, donde laboran según sus estimaciones unos tres millones de venezolanos, las condiciones salariales mejoran considerablemente. El trabajador que menos gana en una industria ronda los 100 a 180 dólares al mes. Álvarez indicó que le ha tocado conocer de cerca lo que registran las empresas privadas en Barquisimeto cada vez que tratan de llenar un puesto vacante.
“He conocido de casos de profesores universitarios con postgrado en la UCLA y hasta PhD que están trabajando como vigilantes. Hay empresas que requieren por ejemplo auxiliares contables y se postulan desde contadores hasta politólogo. He visto a recepcionistas que tienen un titulo universitario de profesoras de educación media. Es decir gente súper calificada pero que no encuentran trabajo en su área por la contracción dramática que ha tenido la economía”, apuntó.
Precisa que en 2013 el PIB del país era de 350 mil millones de dólares. Lo que representaba un PIB per cápita o ingreso promedio anual de las personas, de 8.695 dólares, ocupando el puesto número 16 en Latinoamérica. En diciembre de 2021 el tamaño de la economía apenas representó 45 mil millones de dólares.
“Es decir Venezuela al cierre del año pasado tuvo un PIB equivalente al precio de la empresa Twitter que iba a ser vendida la magnate Elon Musk. El enanismo económico del país es tal que un solo millonario norteamericano tiene tantos ingresos como los que se producen Venezuela en un año”, soltó. Según el Fondo Monetario Internacional, la nación tiene el segundo PIB per cápita en dólares más pobre de Latinoamérica, apenas es de 1.823 dólares, descendiendo al puesto número 32, sólo superando a Haití.
“¿Cómo llegamos a este punto?, bueno el 80% de las industrias de Venezuela cerraron y por lo tanto también se perdió esa tasa de empleo, según datos dados a conocer por el expresidente de Conindustria Adán Celis en el año 2021. El 2 de septiembre el presidente de la Cámara Venezolana de la Construcción, Enrique Madureri dijo que el sector registra una paralización del 90%”, mencionó el economista, dos de los sectores que más empleo aportaban al país
Señaló que según declaraciones del presidente de la Cámara de la Construcción en Lara Ronald Arias, tan sólo se construye un edificio este año, dijo que las ensambladoras de vehículos en Venezuela hoy son un cementerio y precisó que el sector comercio también se contrajo un 60%, según datos de Consecomercio.
Autoempleo
Álvarez explicó que buena parte de toda esa fuerza laboral perdida, terminó migrando del país. De 6.8 millones de venezolanos que según la ONU han salido por la crisis económica, más de cuatro millones son venezolanos en edad productiva que buscaron nuevos horizontes y hoy ayudan a desarrollar la economía de otras naciones.
La segunda vía que tomaron estas personas desempleadas, cuyas condiciones empeoraron por los dos años de pandemia con cuarentena radical que registró el país, fue el de conseguir un trabajo por cuenta propia. Allí se concentra alrededor del 40% de la población y se incluyen tantos profesionales como no profesionales.
De acuerdo con Alfredo Padilla, director de la Asociación de Trabajadores Emprendedores y Microempresarios de Venezuela (Atraem), Más de 8 millones de venezolanos tienen un autoempleo, “es la fuente principal de empleo del país”, alegó.
Una tercera parte se dedica a la economía informal. “Allí no se incluyen solamente los buhoneros. Una persona informal es aquella que no tiene un salario constante, no tiene prestaciones sociales, ni caja de ahorro, trabaja a destajo y sus ingresos son inestables. Un trabajo de esta naturaleza en absoluto puede ayudar a recuperar la economía de Venezuela”, indicó Gerardo Álvarez.
Se acostumbraron
Según el economista Aarón Olmos, profesor de postgrado IESA, aunque Venezuela registra un rebote estadístico no todos los sectores económicos están creciendo, por lo tanto las ofertas de trabajo son insuficientes para la demanda de personas.
“Ese incremento de la economía no representa un aumento de contratación, porque un trabajador en nómina es una de las salidas de dinero más elevados que tienen las empresas públicas y privadas. La nómina representa en un presupuesto entre un 75 y 80% porque no solamente es el salario, son los pasivos laborales, beneficios contractuales que le pagas a un trabajador. Lo que el trabajador gana al mes se debe multiplicar por 7.5%; 8% ó 9%, dependiendo de los contratos”, explicó.
Además desde el 2020 con la pandemia ocurrió un fenómeno en casi todas las empresas del país y es que por el bajo consumo se acostumbraron a trabajar con el mínimo personal contratado. “Muchas empresas aprendieron a manejarse con un tamaño más pequeño. La gente trabaja de manera rotativa, algunos desde casa y hay empresas que dijeron trabajamos bien, tenemos menor nómina, menor costo sobre presupuesto, vamos a trata de ser más eficiente. Entonces por eso no hay tantos incentivos para contratar más personal”, apuntó.
Donde se ven contrataciones es en negocios nuevos que están abriendo, o en algunas industrias como las sector alimento que se han expandido. Preciso que tanto el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), como el Ministerio de Trabajo, mantienen ocultas las cifras de desempleo en Venezuela desde 2011.
Ausencia laboral aumenta
Antonio Suárez, presidente de Federación Nacional de Empleados Públicos (Fedeunep), indicó que desde inicio el año han percibido ausentismo laboral en las empresas del Estado.
“Hay una realidad y es que mucha gente se ha ido del sector público. El personal que tenía la mayor experiencia, la mayor capacitación se fue y entonces te consigues que funcionarios que están empezando, recién graduados que están asumiendo cargos sin tener la capacitación ni la responsabilidad necesaria. Y aquellos que tienen mayor experiencia o mayor capacitación se encuentran sobrecargados de trabajo”, indicó.
Se mantienen en sus puestos de trabajo porque les dan un bono que no tiene nada que ver con las prestaciones sociales o se ven beneficiados con las bolsas de alimentos que da el Gobierno, según precisó.
Según la ENCOVI, entre 2014 y 2021 se ha reducido el empleo formal 21.8%. (4.4. MM de empleos). 70% son del sector público y 30% del privado.
Industria busca capacitar personal
El presidente de la Cámara de Industriales de Lara, Joel Segura, informó que desde 2014 hasta 2020 hubo una fuerte deserción de personal en las empresas de manufactura, lo que los ha llevado a capacitar personal.
“Desde La Fundación Educación e Industria (FUNDEI), estamos buscando alianzas con las universidades para formar a jóvenes en oficios claves para las industrias, como molineros, técnicos, operadores de máquinas de empaque que está demandando el mercado laboral en Venezuela”, dijo.