El canciller Yván Gil denunció un nuevo ataque contra una embajada venezolana por arte de «desquiciados fascistas». En esta oportunidad se trató de la sede diplomática en Oslo, Noruega.
“La responsabilidad de la inviolabilidad de las sedes diplomáticas es del Estado Receptor, esperamos que las autoridades den inmediatamente con los responsables de estos atentados. El país y el mundo se dan cuenta de quiénes son estos desquiciados fascistas, capaces de arremeter contra los intereses del pueblo venezolano”, comentó Gil en su cuenta en X.